Santo Domingo.- República Dominicana ocupa un sitial importante entre los paíeses con menor depreciación de su moneda registrada desde el cierre de diciembre al 13 de mayo de 2020, frente a sus pares de América Latina, Centroamérica y el Caribe.
La información la ofreció el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), mediante un comunicado.
Destaca que al cierre de 2019 logró acumular reservas internacionales en niveles óptimos históricos, iniciando el año con reservas en torno al 10% del PIB, equivalentes a US$8,782 millones. Al 13 de mayo de 2020, las mismas ascienden a US$8,603 millones.
Esta disponibilidad de reservas ha permitido al Banco Central participar en el mercado de compra y venta de divisas, inyectando al mercado el monto de US$1,928 millones a través de su Plataforma Electrónica de Negociación de Divisas.
Añade que ha desplegado una amplia estrategia de intervenciones, poniendo a disposición del mercado diversos instrumentos, tanto en el mercado de contado (spot) como a futuro (forwards), facilitando así que los agentes económicos puedan organizar sus compras de divisas presentes y futuras, y a la vez, ofreciendo mecanismos que permiten cubrir sus expectativas de riesgo cambiario típicas de eventos de alta incertidumbre como el que vivimos frente a la propagación del COVID-19.
“Las acciones del Banco Central han contribuido a mantener el flujo de la moneda norteamericana en la economía en este entorno adverso, con lo cual el sector privado, principalmente los sectores prioritarios (supermercados, agroindustria, alimentos en general, farmacéuticos, salud y energía), han podido operar sin mayores contratiempos”, indica la nota.
Agrega que, paralelamente, a través de esfuerzos coordinados con la banca local, la participación del BCRD ha permitido aprovechar la liquidez en moneda extranjera que mantienen los bancos en el exterior para apoyar la oferta de divisas en el mercado ante episodios de alta demanda.
Aclara que las entidades financieras mantienen una posición neta positiva en moneda extranjera y cuentan con amplia disponibilidad en dólares que superan los US$1,900 millones, lo cual es sano e indica que los bancos tienen la capacidad de calzar sus pasivos en moneda extranjera, y por ende, no requieren acaparar divisas del mercado.
Pide prudencia
Al la vez el Banco central llamó al sector privado y a la ciudadanía en general a actuar con prudencia y paciencia, tomando en cuenta que la economía dominicana no está aislada de los eventos que ocurren en el resto del mundo.
“El Banco Central hace un llamado a mantener la confianza en los fundamentos de la economía dominicana y la credibilidad en el Banco Central que, como de costumbre, se mantiene vigilante ante el desarrollo de eventos que pudieran impactar el logro de su meta de inflación y el comportamiento ordenado del mercado cambiario, poniendo a disposición todas las herramientas necesarias para mantener ancladas las expectativas de los agentes económicos y el público en general”, indica la nota.
La entidad reafirmó que mantiene su compromiso con el pueblo dominicano de propiciar un clima de certidumbre que se necesita hoy más que nunca para adecuar las condiciones que permitan al país superar esta situación adversa y lamentable por la que atraviesa la humanidad.
“Confiados en que una vez superemos esta crisis de salud, podremos seguir apostando a la senda de crecimiento de la economía dominicana en un ambiente de estabilidad macroeconómica”, señala el comunicado.
País mantiene buena calificación
El BCRD destaca además que aunque varios países de la región han experimentado reducciones en sus calificaciones crediticias como daños colaterales adicionales provocados por el choque negativo que enfrenta el mundo ante la pandemia, República Dominicana ha sido una gran excepción.
“En su más reciente informe, la calificadora Fitch revisa la perspectiva crediticia del país de estable a negativa sin modificar nuestra calificación, haciendo puntualizaciones que invitan a ser cautos ante el escenario internacional que vivimos, y a la vez, manteniendo una señal de confianza en la economía dominicana”, precisa.
Agrega que de acuerdo a la opinión de diversos bancos de inversión de prestigio internacional y de importantes inversionistas locales, República Dominicana sigue siendo un destino de inversión atractivo que se ha distinguido por mantener un clima de estabilidad política, crecimiento económico robusto con baja inflación, estabilidad de su moneda y ausencia de desequilibrios significativos, tanto externos como fiscales.
“Todas estas condiciones contribuyen a consolidar un entorno macroeconómico saludable que permite anclar las expectativas de los inversionistas en el mediano y largo plazo”, prevé el BCRD.