El Papa Francisco pidió rezar por aquellos que en tiempos de la actual pandemia hacen negocio con los necesitados y se aprovechan de las necesidades de los demás, así por «los mafiosos, usureros», para que el Señor «toque su corazón y les convierta», dijo Francisco durante la misa matutina en su residencia de la Casa Santa Marta.
La reflexión «crítica» de Francisco hoy (miércoles) a quienes hacen negocio con los más necesitados en el momento actual, en que el mundo intenta gestionar la pandemia del coronavirus.
«Recemos por aquellos que en tiempos de pandemia hacen negocio con los necesitados, se aprovechan de las necesidades de los demás. A los mafiosos, usureros, que el Señor toque su corazón y les convierta’, dijo Francisco durante la misa matutina en su residencia de la Casa Santa Marta.
«Cuando pensamos en la venta de personas, nos viene a la mente el comercio de esclavos de África hacia América, pero es algo del pasado, o el comercio de las niñas yazidíes vendidas al Daesh, pero es algo lejano», observó.
Afirmó que «todos los días hay Judas que venden a las hermanas y hermanos, explotándolos en el trabajo, no pagándoles lo justo, no reconociendo sus deberes».
Son ellos, los explotadores sociales, impecables en apariencia, pero a escondidas comercializan con la gente. La explotación humana, la venta del prójimo’, añadió Francisco.
Animó a todas las personas a servir a Dios y condenó a quienes adoran al dinero, porque al final se convierten en esclavos.
«Cada uno de nosotros tiene la capacidad de traicionar, vender, seguir su propio interés. Cada uno de nosotros tiene la oportunidad de dejarse atraer por el amor al dinero o los bienes o el bienestar futuro», concluyó.