Pese al llamado del presidente Luis Abinader, en reiteradas ocasiones, para que se detenga la construcción de canal de riego en el río Masacre, los haitianos continúan la obra “a todo vapor”.
Este sábado, varios medios de comunicación lograron ingresar a la zona restringida que permite una vista directa a poca distancia de la obra en construcción.
Los integrantes de la prensa, por motivos de seguridad, fueron provistos de chalecos y cascos antibalas, y notaron los trabajos en la obra.
Posturas distantes y pocas posibilidades de diálogo
Desde que a las 06:00 hora local del 15 de septiembre República Dominicana clausurara las fronteras terrestres, marítimas y aéreas con Haití, con el consiguiente bloqueo del comercio bilateral, no ha habido avances e, incluso, las posturas se han distanciado más.
Si bien al inicio de esta crisis el Gobierno de Haití se desmarcaba del proyecto, una iniciativa privada sin apoyo oficial, ahora el Ejecutivo afirma que hay que seguir adelante con las obras del polémico canal y ha decidido apoyarlas.
«Sí, el canal debe construirse. Sí, hay que esforzarse para que el agua llegue a los canales como es debido. Sí, es a través de la solidaridad y la unidad como puede regarse la tierra de (la llanura de) Maribahoux», afirmó el jueves el Ministerio de Agricultura en nombre del gabinete, que defiende el derecho de «Haití a beneficiarse de forma equilibrada de los recursos que comparte con su vecino dominicano».
Por todo ello y ante la exigencia del Gobierno dominicano de que las obras deben paralizarse antes de sentarse a hablar, la reanudación de las conversaciones bilaterales no parece próxima.