Un aumento salarial improcedente frente al actual contexto económico, tanto local como global, podría producir un efecto inflacionario que resultaría peor al país, ya que si se produce un incremento en los sueldos, subirían los precios y se estaría disminuyendo lo que devengarán los beneficiados.
La advertencia en ese sentido, la hace el presidente de la Asociación Nacional de Empresas e Industrias Herrera (ANEIH), Euri Andújar, tras advertir que es «impensable» la propuesta de aumento salarial de un 30%, como propone la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS).
“Impensable porque en un año y medio una mediana empresa habrá aumentando un 70%, ni siquiera en países con una hiperinflación como Argentina lo está haciendo, o Chile o Colombia, que ahora mismo están sufriendo el embate inflacionario”, señaló.
“La motivación es la siguiente: por cada empleo que hay, hay un desempleado aquí en nuestro país”, advirtió.
Entiende que hay que ser moderado con las peticiones de aumento salarial, con el objetivo de no afectar las micro y pequeñas empresas, las cuales asegura son las más vulnerables.
“Lo del aumento salarial es un tema siempre espinoso en todos los tiempos, no puedo decir que es más fácil o difícil ahora que antes, porque siempre es un tema difícil”, alertó.
Plantea que es un tema difícil porque en el ambiente postpandemia el sector tuvo que hacer un aumento salarial, en muchos casos considerable.
Andújar, observó que, en el caso de la mediana empresa, el aumento salarial fue de un 40%.
«Afortunadamente hay una clasificación empresarial, lo cual permite establecer porcentajes justos y acorde con el nivel de inflación, como refleja el Índice de Precio al Consumidor (IPC), en el primer quintil.
Aclaró que esto no significa que el empresariado esté en contra de que se produzca un aumento salarial, sino que solo pone en contexto la situación que pudiera acarrear un alza desproporcionada.