Sigue el «tranque» para comerciantes establecidos en la zona fronteriza, ya que Haití no permite que sus nacionales compren y lleven productos dominicanos que adquieran en la vecina República Dominicana, según reporte de medios locales en Pedernales.
Según trascendió nacionales del país vecino que lograron entrar a territorio dominicano a comprar productos en el mercado fronterizo fueron interceptados al regresar a su país por autoridades de Anse-a-pitre, que se incautaron productos, «destruyeron y pisotearon».
Esta situación mantiene al «borde de la desesperación» comerciantes de esta zona que se están yendo a la quiebra, que inició con el cierre, a mediados del pasado septiembre por (aire, mar y tierra) de la frontera que compartimos con Haití, República Dominicana y que siguen los haitianos, por no estar de acuerdo con algunas de las medidas que adoptó nuestro país cuando decidió su reapertura (frontera).
Se informó que ellos cruzan a Pedernales violando reglas de Haití, pero al regresar, incluyendo mujeres con poncheras en la cabeza con ropa para vender y productos agrícolas para subsistencia, tienen dificultades cuando regresan a su territorio.
Ayer fueron observados algunos haitianos que viven en sectores agrícolas de la zona cafetalera de Pedernales y costa Sur, como Enriquillo y Paraíso, vendiendo como de costumbre productos agrícolas en el mercado municipal, así como ropas usadas y calzados.
Los dominicanos y los haitianos están divididos cada cual en los mercados municipales de Pedernales y de la comunidad haitiana de Anse-a-pitre, en los cuales se vislumbra una baja demanda y la preocupación ante la escasez de productos alimenticios.
Haitianos consultados dijeron que no se dejarán «morir de hambre», aunque otros que están en contubernio con las autoridades aseguran que no se doblegarán por el cierre de la frontera, sobre todo, de su territorio donde no permiten abrir el portón de salida.
En las últimas horas también los extranjeros para poder regresar a su país por este lado de la frontera han tenido que cruzar por un riachuelo que divide ambos lados, el cual registra una crecida por las últimas lluvias ocurridas en la zona cafetalera.
Biométrico
Mientras tanto el Centro Biométrico que funciona aquí mantiene el registro de los escasos extranjeros que llegan voluntariamente de regreso a su país.
Además, tratan de cumplir con las deportaciones, ya que autoridades de Migración, auxiliadas por militares, continúan deteniendo algunos indocumentados, que luego transporta en una camioneta el recinto del Batallón del Ejército, para devolberlos a sa país por la puerta de acceso.
Esta acción es criticada por algunos vendedores dominicanos que entienden en muchos casos son padres de familias del vecino país, que tratan de vender productos agrícolas y comprar otras mercancías que luego llevan a escondidas a su territorio.
Vigilancia
Se mantiene inalterable la vigilancia pese al cierre de la frontera, con el Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestres (Cesfront) y del Ejército de República Dominicana (ERD).
Mientras que en aguas territoriales del Mar Caribe puede observarse con frencuencia una embarcación perteneciente a la Armada Dominicana.
Repúbkica Dominicana y Haití mantienen un conflicto fronterizo, que surgió a raíz de el país vecino construyan un canal sobre el río Masacre o Dajabón, para el desvío de sus aguas.