Cuando #LaLupadelSur publicó que cuatro personas fallecieron en comunidades de Barahona, entre ellas un niño de tres años y una adolescente de 13, a causa de cólera, desde el órgano rector de la salud se intentó, en vez de actuar, en desmentir la especie.
Lejos de hacerlo el Ministerio de Salud Pública confirmó lo que con responsabilidad difundió #LaLupadelSur que ocurría y que ocurre en el municipio Enriquillo interviniéndolo porque hay un probable brote de esta enfermedad que ataca a los más vulnerables.
Como medio nos ganamos la animadversión de los funcionarios de la Dirección Provincial de Salud Pública de Barahona (DPS), con señalamiento de que somos “dañinos” porque hacemos pública información que la ciudadanía debe saber para que se proteja y pensar así del periodismo que como ciencia es clave en una sociedad democrática es pecar de ignorante, que es más que atrevido.
El periodismo molesta el poder, es incómodo con él, hace públicas sus miserias, pero visibiliza acciones que le benefician, pero no renunciamos jamás a informar, sobre todo, con la responsabilidad que nos caracteriza como espacio informativo.
Nuestra intención no es dañar y el periodismo que hacemos desde #LaLupadelSur, solo intentar servir de vaso comunicante de nuestra comunidad, así como el país para que haya solución a los problemas que nos afectan social, política y ambientalmente.
Lo que no pudo negar el Ministerio de Salud Pública ni su sectorial en Barahona, en el caso de la DPS, es que no difundimos mentiras, sino que actuamos desde y con la verdad porque ciertamente el cólera “ataque” con muertes, pero también con contagios que preocupa porque si no se toman correctivos pudiera salirse de control a las autoridades.