Luego de 50 días del Estado de Emergencia en República Dominicana, la curva de contagio del coronavirus (COVID-19), es más plana que en otros países de la región, pero no es momento de «bajar la guardia».
Así lo manifiesta el ministro de la Presidencia y coordinador de la Comisión de Alto Nivel para la Prevención y el Control del COVID-19, Gustavo Montalvo.
Montalvo, atribuyó la reducción de velocidad de los contagios al sacrifico colectivo del pueblo dominicano para cumplir las medidas de distanciamiento social y físico, así como a las iniciativas implementadas por las autoridades.
“Esto no quiere decir que debamos bajar la guardia, al contrario, debe servirnos para ver lo importante que es cumplir con las medidas que hemos tomado”.
Explicó que, durante estos 50 días, el virus se ha extendido por el mundo hasta infectar a más de 3,9 millones de personas y provocar más de 270,000 muertes.
“Por supuesto, el ritmo de crecimiento varía mucho de país a país. Mientras que parece haberse ya estabilizado en Asia y en varios países de Europa, es en las Américas donde más está creciendo ahora el contagio”, advirtió.
Estimó que solo en Estados Unidos hay más de un millón doscientas mil personas infectadas, así como más de 75,000 fallecidas.
“Más al sur, en Brasil México, Perú, Ecuador y Bolivia, el virus está ralentizando su avance, si antes tardaba menos de 4 días en duplicar el número de casos, hoy tarda doce. La curva en estos países se está aplanando, pero aún no es estable”.
Afirmó que, por tales motivos, la directora de la Organización Panamericana de la Salud, Carissa F. Etienne, sugirió esta semana que en estos países deben mantenerse vigentes todo el conjunto de medidas preventivas, como hasta ahora.
“En nuestro país la situación es algo mejor. Aquí el COVID tarda 19 días en duplicar la cantidad de contagiados confirmados, cuando al comienzo del Estado de Emergencia duraba entre 4 y 5 días. Por así decirlo, la curva es más plana en República Dominicana que en esos países de la región”.
24 de cada 100 contagiados recuperó
Además, de lograr descender la rapidez de contagios, nuestro país puede exhibir que ya 24 de cada cien personas con el virus se han reestablecido por completo, mientras que un alto porcentaje está en proceso de mejoría y se espera que en los próximos días concluyan su recuperación.
Levantamiento prematuro medidas generaría alto costo humano
“El reto que enfrentamos ahora todos los países del mundo es sencillo de entender, pero difícil de afrontar: cuanto antes volvamos a la normalidad menor será el costo económico, pero mayor puede ser el costo humano”.
El ministro de la Presidencia sostuvo que “alcanzar el equilibrio es lo que buscan todos los países que están llevando a cabo graduales aperturas de sus economías. Y será también el que nos guiará a nosotros en las próximas fases que, entendemos, habremos de empezar desde que las condiciones lo permitan”.
Advirtió que “por el momento, debemos ser cautelosos, porque podemos ver ya numerosos ejemplos de países que han relajado demasiado rápido las aperturas y se han visto obligados a dar marcha atrás”.
Citó los ejemplos de Alemania, que a finales de abril había ya iniciado su lenta estrategia de desescalada y la semana pasada debió dar marcha atrás por un repunte de los contagios; y Chile, que también se proponía flexibilizar las medidas de cuarentena, y ha debido volver a instaurar el cierre de su capital de 7 millones de habitantes.
“Mientras tanto, países como Italia, España o Estados Unidos, que emprenden ahora una fase de flexibilización gradual de la cuarentena, lo hacen manteniendo una firme vigilancia ante cualquier rebrote a nivel municipal, regional, o nacional, que obligue a dar marcha atrás”.
Segunda ola de coronavirus
El coordinador de la Comisión de Alto Nivel también se refirió a la segunda ola de coronavirus que alertan diversas voces entre la comunidad científica.
“El director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades, de Estados Unidos, Robert R. Redfield, aseguró que una segunda ola en el invierno de 2020-21 podría ser peor de lo que hemos experimentado esta primavera”.
Señaló que como alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS), “estas olas pueden estar separadas por meses, por lo que una sensación inmediata de tranquilidad tras el control de un brote en un lugar puede ser prematura y producirse nuevos repuntes”.
Importancia de seguir cumpliendo con nuestro deber
“Por eso, es importante que todos sigamos cumpliendo con nuestro deber”, dijo al tiempo de destacar que el Estado seguirá cumpliendo con su parte: equipando el Sistema Nacional de Salud, asegurando la disponibilidad de tests y disponiendo de espacios de aislamiento y tratamiento suficientes.
Recomendó a la población mantener el distanciamiento social de 2 metros, el lavado de manos permanente y el uso de mascarillas fuera de la casa. “Es decir, lo que se ha dado en llamar ‘convivir con el COVID-19’ de forma segura”.
“Hay que entender que este es el primer nivel de la pirámide de prevención. Estas son rutinas que debemos mantener en nuestra vida diaria, hasta que se descubra una vacuna o un método de tratamiento realmente transformador. Es decir, será algo permanente hasta este momento”.
Puntualizó que el segundo nivel de prevención consiste en la cuarentena voluntaria, que debe mantener la población de mayor riesgo, incluyendo los mayores de 60 años o pacientes crónicos.
“Este segundo piso no tiene que ver con cuarentena si o cuarentena no, debe ser, al igual que las medidas de prevención, permanente mientras no termine el brote de Coronavirus, incluso si se levantan las medidas del estado de emergencia para el resto de la población”.
“Por último, la cuarentena obligatoria es, como hemos visto en localidades como San Francisco de Macorís, la medida más drástica y efectiva para disminuir la velocidad del contagio”.
En ese sentido, explicó que la decisión de instaurar una cuarentena obligatoria en todo el país depende de que el conjunto de la población dominicana se adapte al cambio cultural necesario para entender que ese primer nivel de prevención no tiene, por el momento, marcha atrás.
“Mientras tanto, vale la pena recordar que, en este momento, las restricciones vigentes son las mismas que se establecieron al comienzo del Estado de Emergencia. Y que, por tanto, prevalece la prohibición de operar para aquellos negocios que no fueron explícitamente autorizados para hacerlo mediante los Decretos 135-20, y 136-20 ratificados mediante el decreto 154-20, o aquellos que han sido autorizados a operar por la Comisión de Alto Nivel por razones justificadas”.
Advirtió que cualquier negocio que no esté incluido en las mencionadas disposiciones deberá permanecer cerrado y la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas tienen instrucciones precisas de proceder al cierre inmediato de cualquier establecimiento que encuentren abierto.
“De la misma forma, continua vigente la disposición que limita la circulación de personas aún entre las 6 de la mañana y las 5 de la tarde. Recordamos a la población que deberán hacer únicamente los traslados estrictamente necesarios, para realizar compras de alimentos y productos esenciales o de medicamentos; siempre con la debida protección en el rostro”.
C5i, aliado fundamental
Destacó que, desde el Centro de Comando, Control, Comunicaciones, Computadoras, Ciberseguridad e Inteligencia del Ministerio de Defensa (C5i), se realiza un monitoreo diario de la velocidad de contagio en cada lugar y, de acuerdo al comportamiento que se vaya observando, se van tomando las medidas necesarias.
Escenario más dinámico
“Vamos, por tanto hacia un escenario más dinámico que el que hemos vivido en los últimos 50 días. Un escenario cuyos detalles, les recuerdo, serán anunciados ampliamente por el señor Presidente de la República o por esta Comisión en cada momento”.
Mientras, el ministro de la Presidencia adelantó que “la responsabilidad no será ya de una Comisión o una institución en concreto. La responsabilidad estará distribuida en cada municipio, cada empresa, cada barrio y cada hogar”.
“Porque solo atendiendo a esos dos primeros niveles de la pirámide que mencionamos; medidas para convivir con el coronavirus y cuarentena voluntaria, evitaremos perder el terreno ganado con tanto esfuerzo en las últimas semanas y tener que volver a adoptar medidas más duras”.