Miles de dominicanos y dominicanas de ascendencia haitiana, privados de su nacionalidad y, por lo tanto, creo esta decisión creo una apatridia a partir de la sentencia 168/13 del Tribunal Constitucional, razón por la cual las personas despojadas de su nacionalidad cada año se pronuncian frente a esta situación.
Grupos nacionalistas y ultranacionalistas, quienes intentan desconocer el derecho sagrado a la protesta, encontraron en la vicepresidenta de la República Raquel Peña, un dique de contención a su despropósito frente a estas personas despojadas de su nacionalidad hace más de una década por el Estado dominicano.
Peña, quien está al frente del Estado, por el viaje del presidente Luis Abinade a Nueva York, dijo hijos e hijas de padres madres haitianos o dominicanos, «tienen derecho a protestar» libremente en defensa de sus causas o ideas.
Sin embargo, la vicepresidenta de la República Dominicana, es de opinión que el Gobierno, en todo caso, lo que hace es defender la Constitución en materia de migración, entre otros temas.
“Vivimos en un país democrático, cada quien tiene derecho a protestar por lo que cree que realmente es lo correcto; pero nosotros estamos enmarcados en cumplir la Constitución y las leyes”, manifestó.
Sus observaciones las hace porque el Movimiento Reconocido protestó próximo al Palacio Nacional, para exigir a cientos de dominicanos y dominicanas de ascendencia haitiana se les reconozca la nacionalidad dominicana, de la cual fueron despojadas-os.
De niña sus padres la llevaban
Habló en la iglesia del Santo Cerro, en La Vega, a donde acudió a venerar en su día a la Virgen de las Mercedes. Allí recordó que de niña sus padres la llevaban a ese santuario cada año.
“…venimos aquí a acompañar al pueblo, pero sobre todo a pedirle a nuestra Virgen de las Mercedes, que siempre nos siga acompañando para seguir llevando los destinos del país por un camino de mucha luz, de mucha prosperidad para todos los dominicanos”, añadió.
La vicemandataria, que tenía en sus manos un velón con la imagen de la virgen, estuvo acompañada por el ministro de la Presidencia, José Ignacio Paliza, y visitó el santuario del Santo Cerro representando al presidente Luis Abinader, que se encuentra en Estados Unidos agotando una importante agenda de actividades oficiales.