Santo Domingo.- Si el presidente Luis Abinader no interviene de inmediato, el virus de la Peste Porcina Africana (PPA) podría prolongarse por tiempo indefinido su circulación en el país, debido a que los programas de control y erradicación de esa y otras enfermedades como la Brucelosis y la Tuberculosis están a la deriva, como barco sin rumbo.
La denuncia la hace el Colegio Dominicano de Médicos Veterinarios (COLVET), a través de una carta que dirige su presidente, doctor Félix Flores a directores de medios de comunicación.
En su misiva, Flores, afirma que se trata de una situación insostenible y mortificante porque afecta la aplicación de las líneas institucionales de mando e impide la ejecución de los servicios de asesoría técnica que en sanidad y producción deben dar los veterinarios a los productores pecuarios.
Afirma, además, que la consecuencia inmediata de prolongarse indefinidamente la circulación del virus de la PPA en el país es, asimismo, la prolongación de las vedas que mantienen otros países a nuestras exportaciones de productos cárnicos porcinos y su colocación en los mercados internacionales.
«Esto limita la frontera comercial del país y reduce el ingreso de divisas a nuestra economía por ese concepto», expone en su carta a directores de medios de comunicación el Colegio Dominicano de Médicos Veterinarios.
Rebajan sueldos y retención de pagos de incentivos
El Colegio de Médicos Veterinario afirma que una situación mortificante son los atropellos contra estos profesionales y técnicos, a los cuales de manera inusual e ilegal se les rebajan los sueldos que devengaban hace más de 15, 20 y hasta 30 años.
Afirman que nunca había sucedido en la DIGEGA, pero ahora las nuevas autoridades se han aumentado los suyos hasta un 60 por ciento y disminuyeron los que devengan los de menor escala.
«A todo lo anterior se agrega, la retención por más de cuatro meses del pago de los incentivos que de manera regular entregan a las autoridades las empresas navieras y líneas aéreas para los profesionales que trabajan en cuarentena animal de los puertos y aeropuertos del país cubriendo horarios corridos de hasta 24 horas», expone la carta.
Afirma que esa barbaridad, injustificable, impacta de manera demoledora sobre los ingresos de los veterinarios, especialmente en un contexto en que la espiral inflacionaria reduce muy sensiblemente el poder adquisitivo de los sueldos y salarios de estos profesionales.
Señala que todo esto sucede, ante la mirada indiferente de autoridades, por lo que exhorta a que alguien con potestad para hacerlo ponga fin a la crisis que atraviesa la institución cuyo rol es implementar las políticas públicas de producción de alimentos de origen animal y garantizar su inocuidad.
«La DIGEGA por ser la principal institución empleadora de médicos veterinarios en el país y el rol que desempeña, amerita su fortalecimiento y la atención debida», indica.
Sostiene el COLVET que además, de perjudicar a estos técnicos y profesionales, la prolongación de esta crisis perjudicará grandemente a la población general, por cuanto ésta vería muy limitado su acceso a alimentos de origen animal en suficiente cantidad, calidad y a precios adecuados y que estén a su alcance.