Cincuenta organizaciones religiosas, sociedad civil y personalidades vinculadas a la defensa de los migrantes, consideran «inaceptable» arrestar y deportar mujeres haitianas embarazadas y parturientas, calificándola de «cruel e inhumana».
Las organizaciones, agrupadas en la Conferencia Ecuménica sobre las Migraciones de República Dominicana, demandan de las autoridades detener al cruel e inhumano agravio contra las haitianas embarazadas y parturientas.
Darío Solano, de la Comisión Afrodescendientes de la Alianza Continental (CON VIDA 20), una de las organizaciones firmantes, señaló que ningún sistema jurídico de Estado Soberano está facultado para ejercer violencia alguna contra los seres humanos, sean éstos ciudadanos nacionales o foráneos. Agrega que la dignidad humana de la persona, por su condición de criatura divina, es Sagrada e inviolable.
«Es lamentable que una mujer tenga que abandonar su propio país para atender su embarazo en tierra extraña porque su propia patria no le brinda las debidas atenciones». «El fenómeno presente tiene un lado vergonzoso para la República Dominicana», establecen las organizaciones en un comunicado.
El comunicado ecuménico, además de Solano, fue presentado por la pastora Jocelyn Rivera y por Denisse Pichardo.
Propuestas ante situación
Las organizaciones y personalidades firmantes proponen que el gobierno dominicano retome su tradición solidaria con el país vecino, ofertando la Construcción de cuatro Complejos de Salud Sanitaria Básica y Servicios Médicos Especializados en igual cantidad de puntos fronterizos del lado haitiano (Anse-a-Pitres, Malpas/Fond Parisyen, Belladere, y Wanamenthe).
También sugieren que el Caricom siente un precedente solidario con Haití, ofertando la Construcción de una Ciudad Sanitaria Nacional con todos los servicios médicos especiales en Puerto Príncipe-Capital del País.
¨Que la Cámara Haitiana de Industria y Comercio, con sede en Puerto Príncipe, oferte la Construcción de 10 Maternidades en los respectivos 10 Departamentos del país, las cuales garanticen todos los servicios médicos de medicina general y especialidades, y en particular los pertinentes servicios especializados de Ginecología, Obstetricia y Partos¨, agrega el comunicado.
Plantean que los recursos para sostener esas maternidades deben ser aportados por los sectores pudientes con poder económico, mediante la práctica de la generosidad solidaria para financiar dicha propuesta.
Dicen que en la actual tesitura conflictiva que caracteriza las frágiles relaciones bilaterales (Haití / República Dominicana), es inaceptable manipular el Dossier Bilateral con la burda-descarada maléfica estrategia de festinar y exacerbar la Ideología nacionalista, para inculcar el cuco del miedo y atizar el odio frente al país vecino.
También plantean que la Organización Panamericana de Salud asuma la responsabilidad de contribuir, a fin de que se preserve el derecho a la salud de las mujeres embarazadas apresadas y/o repatriadas.
Dentro de los firmantes está el obispo Julio César Holguin, de la Iglesia Episcopal Dominicana, el obispo Telésforo Isaac, de la Iglesia Episcopal Dominicana, monseñor Faustino Burgos Brisman, Julín Acosta, sacerdote católico, padre William Arias, sacerdote católico, Nelson Acevedo, sacerdote católico, Robert de la Cruz, coordinador Nacional de Solidaridad de las Comunidades Eclesiales de Base (CEBs), entre otras organizaciones y personalidades, tanto locales como internacionales.