Pese a la oposición, no solo de los sectores organizados de San Juan, sino de ambientalistas de toda la República Dominicana, el ministro de Energía Minas, Antonio Almonte, dejó abierta la posibilidad de que el proyecto minero Romero sea explotado.
Almonte, entrevistado en el programa televisivo El Día, que se transmite por Telesistema, canal 11, reveló que la propuesta del proyecto minero Romero es un yacimiento de mina de oro que podría ser explotado con técnica subterránea.
Quienes han rechazado al proyecto
Distintos sectores: políticos, religiosos, ambientalistas de todo el país han rehazado publicamente la explotación en loma Romero de San Juan de la Maguana por entender resultaría lesivo para el medio ambiente, ecología y los recursos naturales de la zona.
Entre quienes han expresado de manera pública su rechazo al proyecto minero son: el obispo de San Juan, monseñor Tomás Alejo Concepción y 19 sacerdotes de las provincias Azua, San Juan y Elías Piña.
El clero de esa provincia, advirtió al presidente Luis Abinader sobre «las consecuencias nefastas para la salud y la vida de esta zona del país», de la pretendida explotación minera en el proyecto El Romero. Mediante una comunicación enviada a los medios, los religiosos se opusieron a que el mandatario autorice a la empresa canadiense Goldquest explote la mina.
El senador Félix Bautista, también se opone a la explotación de mina Romero, ubicada en la sección Romero, del Distrito Municipal Sabaneta, municipio San Juan de la Maguana, por parte de la empresa canadiense llamada Gold Quest.
Asimismom la Comisión de Ciencias Naturales y Medio Ambiente de la Academia de Ciencias de la República Dominicana (ACRD), propuso debatir ampliamente el proyecto minero y no tratar de imponer la propuesta del Ministerio de Energía y Minas (MEM), tras indicar que ha sido ampliamente debatido, teniendo un rechazo social amplio.
Señaló que la minería es una de las actividades más agresivas contra el medio natural, cuyas huellas y capacidad de recuperación son difíciles de alcanzar, sobre todo, cuando no se está dispuesto, primero, a realizar serios y rigurosos planes de restauración ecológica, y segundo, cuando solo prima el beneficio, las utilidades, que es lo que ha caracterizado la minería en República Dominicana.