Santo Domingo.- “Constituye una vergüenza que un gobierno que pisotea derechos a empleados públicos: humillándolos y acosándolos, niega sus prestaciones y pensiones, sus años de servicios en la administración pública, retiene el pago de salarios; lo proclamen quienes están llamados a defender la clase trabajadora”.
Así califica la Secretaría de Asuntos Laborales (SALA), del partido Fuerza del Pueblo, la proclama que hicieron del actual presidente y de quien dirige el gobierno dominicano.
En cambio, llama a la clase trabajadora a rechazar la política que lleva a cabo el presidente Luis Abinader en tres años de gobierno y, en cambio, los anima a crear un frente que impida la actual situación de deterioro que se evidencia en sus ingresos, en el alto costo de la vida, en salud y, sobre todo, en la seguridad ciudadana.
Nélsida Marmolejos, titular de ese organismo, veterana líder sindical y miembro de la Dirección Política de la FP, afirmó que «nunca como ahora», se encuentran en tribunales Contencioso Administrativo, una cantidad desbordante de sometimientos al actual gobierno, por violar los derechos de los servidores públicos conculcados.
“En vez de recibir el apoyo y la solidaridad del movimiento sindical, encuentran a este sector haciendo causa común con quienes niegan esas remuneraciones”, indicó Marmolejos.
“¿Cómo se justifica que dirigentes de larga data hagan causa común con un gobierno que nunca ha hecho un reajuste al salario mínimo del sector público, el que mantiene congelado en RD$10,000.00?», se preguntó la exdirectira de la DIDA.
Afirma que el gobierno (de Abinader), quiere confundir a la opinión pública, proclamando que hizo 22 reajustes de salarios y tarifas, “cuando no ha puesto un solo centavo, ya que el sector privado el que por ley tuvo que hacerlo”.
“Esos reajustes siguen por debajo de los quintiles, que define el Banco Central, de la canasta básica de alimentación”. “Lo más grave es que esos dirigentes repitan esa mentira sin sonrojarse”, observó.
Aseguró que la administración Abinader maltrata a los empleados públicos, poniendo de ejemplo lo que sucedió en el Metro de Santo Domingo. “Crearon un conflicto en el transporte más importante y masivo del país, con la finalidad de provocar cancelaciones”.
Señaló que, con los empleados del Consejo Estatal del Azúcar sucede lo mismo, “a los cuales se les está obligando a renunciar a sus derechos, para echarlos a las calles sin pensión y sin prestaciones”.
Nélsida Marmolejos, dijo que el actual gobierno incumple con la Ley 105-13, de Salario Público, y castiga cada año a los trabajadores, cuando suspende, vía la Ley de Presupuesto, aplicar el Artículo 296, del Código Tributario, para que el tope del salario, exento del pago de impuesto sobre la renta, quede en RD$34,685.00 cada mes, cuando debió exceder los 51 mil pesos.
Peligra la reforma
Advirtió que el apoyo a la reelección, que recientemente algunos dirigentes de tres de las centrales sindicales del país, pone en peligro la discusión de la reforma al Código de Trabajo.
«Sobre todo, cuando se rumora la firma inminente de un acuerdo que reduciría de manera significativa la Cesantía Laboral”, advierte Marmolejos a través de una declaración de prensa. Sostuvo que eso constituye una clara señal de la falta de visión del futuro que tienen esos tres dirigentes sindicales.
“Este es un derecho que tienen los trabajadores dominicanos, desde el año 1944, es decir, hace más de 79 años, constituye la conquista más importante, en lo individual, de los trabajadores, con la que no se puede jugar”, subrayó la titular Secretaría de Asuntos Laborales de la Fuerza del Pueblo.
Hablando en nombre de la Fuerza del Pueblo, Nélsida Marmolejos llamó a trabajadores y trabajadoras (públicos y privados), así como sindicalistas, a no dejarse confundir por quienes, “en estos momentos son beneficiados por el gobierno en perjuicio de las reivindicaciones de la clase trabajadora”.
Hizo saber que la Secretaría de Asuntos Laborales de la Fuerza del Pueblo tiene y establece el compromiso de defender el equilibrio entre los derechos de los trabajadores y los empleadores.