El incremento de 19% que se aprobó y que tendrá lugar en dos momentos: un 15% el próximo abril y 4% en febrero de 2024, que tendrá impacto en el salario mínimo del sector privado no sectorizado, no debe afectar los precios, el desempleo ni la inflación, afirma la Confederación Patronal Dominicana (Copardom).
Laura Peña Izquierdo, presidenta de Copardom, sostuvo que, durante un proceso de análisis con sus economistas, determinaron que el aumento de 19% al salario mínimo no debe repercutir en la tasa de desempleo ni en los precios que registran los productos básicos.
“Veníamos haciendo los números con nuestros economistas desde principio de año. Estábamos muy cautos en tomar la decisión, porque esa decisión no podía acarrear que aumentaran los precios ni la inflación. Les planteamos a nuestros economistas que cualquier incremento al salario no podría traducirse en un aumento de precio ni en la inflación, porque si no de nada sirve ese aumento”, expuso.
Dijo que esta era una de las preocupaciones de los empresarios, porque cuando se produce un aumento salarial muchas empresas despiden empleados por no poder cubrir la carga laboral.
“Incluso, por cada peso, nosotros tenemos que calcular 64 centavos adicionales. Eso es mucho dinero. O sea, una persona que cobra 25 mil pesos, realmente gana 40,000 pesos”, observa.
Señaló que los empresarios tienen que pagar pensiones, seguro de salud, riesgos laborales, el 1% de la nómina al Infotep, regalía, vacaciones, cesantía y preaviso, sin tomar en consideración el tema de la bonificación y cualquier permiso que obtenga el trabajador.
“Realmente la carga laboral en República Dominicana es muy amplia, por eso pusimos el tema sobre la mesa, para que en un futuro, si se habla de pacto social, se tome en consideración esa carga laboral”, indicó.
Tope al pago de cesantía laboral
Copardom, consideró, necesaria una reforma laboral en la que se incluya un tope al pago de la cesantía a los trabajadores sin eliminar derechos adquiridos, con el fin de que las empresas tengan holgura y mayor liquidez para hacer aumentos salariales más sustanciosos.
Peña Izquierdo, planteó que mientras las empresas tengan que ahorrar el dinero de pagar la cesantía de sus trabajadores con base en los salarios aumentados, la situación para ellos seguirá siendo muy difícil.
Sin embargo, aclaró que cualquier cambio o modificación al pago de la cesantía no perjudicaría a los actuales trabajadores, por el principio jurídico de la irretroactividad, que se refiere a la imposibilidad de aplicar una norma a hechos anteriores a la promulgación de esa misma legislación.
“Hay que recalcar que cualquier cambio que haya en la cesantía es un cambio de aquí en lo adelante, porque hay que conservar todos los derechos adquiridos de los trabajadores. A veces ellos temen que no se les reconozcan, pero nosotros nunca hemos planteado no reconocer esos derechos adquiridos”, dice.
Aumento del salario mínimo
La representante de la institución patronal también se refirió al aumento de un 19% al salario mínimo para los empleados privados no sectorizados, al calificar de trascendental la rapidez del acuerdo que lograron con los sindicalistas y el Gobierno, sobre todo, partiendo del hecho que todos quedaron satisfechos.
“Primó aquí el sentido de la responsabilidad, el sector empresarial está comprometido con la sociedad y con los trabajadores. Así lo manifestamos en la mesa. El sector sindical quedaron bastantes satisfechos, ellos pusieron sus necesidades sobre la mesa y nos acogimos a sus requerimientos, porque fue poco a poco que llegamos a ese acuerdo con ellos”, comentó.
No obstante, Izquierdo reveló que Copardom solicitó en la mesa del diálogo diferenciar el aumento para las micro y pequeña empresa, ya que tienen una realidad muy diferente a las medianas y grandes empresas.
Aumento podría traer sus riesgos
El vicepresidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), César Dargam, calificó de trascendente el aumento al salario mínimo de un 19% anunciado por el Gobierno, pero, reconoce que el mismo “podría traer sus riesgos”, como el incremento de los precios de algunos productos.
Entiende, asimismo, que el empleador ha sido solidario al aprobar este incremento tras entender que los niveles de inflación habían deprimido los salarios, tras entender de que «existe la necesidad de que el salario nominal se acerque cada vez más al salario real”.