Euro, moneda que usan los países que conforman la Unión Europea, perdió 1,3% de su valor y se cotizó a 1,0281 dólares, el menor valor desde diciembre de 2002.
De esta manera, ambas divisas (europea y norteamericana), se aproximan a la igualdad por primera vez desde que el euro fue creado en 1999.
Asimismo, la moneda de la UE también marcó una caída frente al franco suizo, retrocediendo hasta los 0,9925 francos, lo que representa el nivel más bajo desde 2015.
Expertos explican que la caída del euro está vinculada con «crecientes temores a una recesión», que se suman a la situación inflacionaria que atraviesa el continente.
Por el contrario, el dólar gana fuerza como consecuencia de la decisión de la Reserva Federal de EE.UU. de mantener «sus subidas de tasas de manera agresiva para frenar la inflación».