El Poder Ejecutivo tiene como objetivo conseguir que el Congreso Nacional le autorice una adenda para poder concluir los trabajos de la presa de Monte Grande, contratos que ascenderían a un monto global de 623.4 millones de dólares.
De esa cantidad, 589 millones de dólares sería el monto autorizado para terminar la presa y 35 millones de dólares para contratar la supervisión de la obra.
El proyecto de ley sometido por el Poder Ejecutivo, el pasado 28 de marzo, es objeto de estudio por parte de la Comisión de Hacienda en el Senado desde el pasado 31 de marzo.
El presidente Luis Abinader explica en la carta remitida a Eduardo Estrella, presidente del Senado, que el proyecto de ley especial autorizaría al Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indhri) adendar por encima del 25% establecido en la Ley No. 340-06 sobre Compras y Contrataciones.
«Es la única forma de garantizar terminar el contrato para los estudios, diseños, construcción y gestión de financiamiento del Proyecto Múltiple Presa de Monte Grande y Rehabilitación y Complementación de la Presa de Sabana Yegua”, indica en su misiva el mandatario.
Según el jefe del Estado, el proyecto que se autorizaría a contratar sería exclusivamente para lograr terminar la fase III de la obra y construir las infraestructuras complementarias que quedarían excluidas.
De ser necesarias, aclara, deberían agotar los procedimientos legales previstos. A través de ese proyecto de ley se autorizaría al Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indhri) aumentar el umbral máximo de incremento del 50% del monto del contrato original permitido por la ley 340-06.
Gobiernos fallan a la región
Durante poco más de cincuenta años la Región Enriquillo exige que le construyan el que califican como «el metro del Suroeste», pero el nivel de irresponsabilidad y ausencia de voluntad política impiden cristalizar este sueño de décadas de las provincias que la conforman: Pedernales, Barahona, Bahoruco e Independencia.
Hay que decir que la iniciativa de construir la obra data de 2009, aunque fue en julio de 2010 cuando el entonces presidente de la República, Leonel Fernández, dio el primer palazo para dejar iniciados los trabajos de construcción.
También, el expresidente Danilo Medina, oriundo de la zona, muy cerca del lugar en que nación, Arroyo Cano, también dio palazos y se comprometió entregarla, pero eso no ocurrió.
El presidente Abinader dio a conocer en febrero del año pasado que acordó con el consorcio Monte Grande que terminar los trabajos en agosto próximo. La presa beneficiará la región Sur a través del suministro de agua potable, irrigación y contención de inundaciones.