Argentina está casi llega a los 100 días de confinamiento, pero el gobierno anunció este viernes un endurecimiento de las medidas de cuarentena del 1 al 17 de julio en la región metropolitana de Buenos Aires, que concentra más del 90% de los casos de COVID-19 de ese país.
«Vamos a volver a cerrar en el Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para que la circulación disminuya drásticamente, para reducir contagios y la demanda de camas» en hospitales, dijo el presidente de centroizquierda, Alberto Fernández, en un mensaje grabado, al referirse a la capital argentina y su periferia.
«Del 1 al 17 de julio les pedimos que se queden en sus casas», agregó Fernández, al renovar por séptima vez la cuarentena que comenzó el 20 de marzo en el país sudamericano.
El foco de las medidas se centrará en la capital y su populoso cinturón urbano -el mayor polo productivo del país, que acumulan 22,746 y 24,645 de los contagiados totales, respectivamente.
La ocupación de las camas de terapia intensiva llega al 54% en el AMBA, donde habitan 14 millones de personas, casi el tercio de la población del país de 44 millones de habitantes. En otras provincias del país federal, ya se ha flexibilizado el aislamiento social.
También se hizo referencia al Chaco (norte), tercer distrito más afectado, con 1,755, mientras que en gran parte del resto del país la situación está más controlada y se mantiene una etapa de apertura.