Derek Jeter, quien jugó toda su carrera profesional con los Yanquis de Nueva York, también se quedó a un voto de haber sido elegido, en su primera aparición en las papeletas, por unanimidad, algo que el año pasado logró su excompañero de equipo, el lanzador panameño Mariano Rivera, el primero que lo consiguió en la historia del béisbol.
El emblemático capitán de los Yanquis apareció en 396 de las 397 papeletas entregadas por la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica (BBWAA).
Jeter, con el 99,7 por ciento de los votos, superó a Ken Griffey Jr., quien obtuvo el 99,3% y era el segundo pelotero más votado de la historia después de Rivera.
«Me quedé sin habla cuando recibí la llamada», aseguró Jeter, accionista y presidente de operaciones de los Marlins de Miami. «Sinceramente, yo estaba bastante nervioso, y cuando lo logré, no supe en realidad qué decir».
Se desconocía de inmediato cuál fue el votante que no eligió a Jeter, quien aparecía en las 219 papeletas que se hicieron públicas antes del anuncio.
La BBWAA revelará el 4 de febrero las boletas adicionales, siempre y cuando los votantes deseen que ello se conozca públicamente.
«No me gusta dar nada por seguro, para no provocar mala suerte», aseveró Jeter. «Nadie da por un hecho que va a ir al Salón de la Fama».
Walker logró la distinción al recibir 304 votos, seis por encima del 75% que requería, en su décima y última aparición dentro de la papeleta de la BBWAA. El año pasado había recibido el 54,6% de los votos.
Otros dos peloteros con números de Salón de la Fama, pero cuya carrera quedó manchada por los señalamientos de consumo de esteroides, obtuvieron más votos en este año que en el anterior.
Se trata del exlanzador Roger Clemens, quien recibió el 61%, en vez del 59,5%, mientras que el exjardinero Barry Bonds se quedó en 60,7%, en lugar de 59,1% que obtuvo en el 2019.
Los dos nuevos miembros del Salón de la Fama, Jeter y Walker, serán exaltados formalmente al museo de Cooperstown, junto con el receptor Ted Simmons y el exlíder del sindicato de peloteros Marvin Miller.
Jeter, cinco veces ganador de la Serie Mundial con los Yanquis, se transformó en el rostro más reconocido del béisbol profesional, al brillar en el mercado más mediático del país como el neoyorquino, desde 1995 al 2014.
Jeter siempre impuso una personalidad especial en el campo con sus acciones a la hora de jugar la pelota que le generaron momentos especiales durante su carrera, sobre todo cuando se enfrentó a los Medias Rojas de Boston y en los partidos de ‘playoffs’.
También está su jonrón por todo el jardín izquierdo para llegar a 3.000 imparables como parte de un partido en la temporada del 2011, en que bateó de 5-5.
Un sencillo que definió su último encuentro como local en 2014, en la novena entrada. Otro hit en su último turno al bate, tres días después, para elevar a .310 su promedio de por vida, fueron algunos de los momentos estelares de Jeter, quien acabó elegido 14 veces al Juego de Estrellas y conquistó el Guante de Oro en cinco ocasiones.
Es el noveno pelotero que llegará al Salón de la Fama tras haber jugado solamente para los Yanquis. Se unirá a los legendarios Lou Gehrig (1939), Bill Dickey (1954), Joe DiMaggio (1955), Earle Combs (1970), Whitey Ford y Mickey Mantle (1974), Phil Rizzutto (1994) y Rivera.
Walker, en tanto, bateó para .313 con 383 cuadrangulares, 1.311 impulsadas y 230 robos por Montreal (1989-94), Colorado (1995-2004) y San Luis (2004-2005). Obtuvo siete veces el Guante de Oro y participó en cinco ocasiones del Juego de Estrellas, además de acabar líder de bateo de las mayores en las temporadas de 1998, 1999 y 2001.