Octavio A. Peña
El deber de la prensa es tomar palabra por los oprimidos en torno a ella.
En esta oportunidad vamos a tener una conversación con Airon Fernández Gil, economista egresado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con un Máster en Economía Agraria, Alimentaria y de los Recursos Naturales en la Universidad Politécnica de Madrid.
El Joven Fernández, forma parte del equipo de investigadores de la Fundacion Juan Bosch, en la cual ha sido parte de distintas investigaciones relacionada con el tema de las AFP, La clase trabajadora, entre otros, además es consultor independiente. En cada de esas investigaciones en las cuales ha sido parte van con un enfoque de generar toma de conciencia dentro del pueblo para desde ahí promover los cambios que tanto se requieren en nuestra sociedad.
“El sistema de capitalización individual no beneficia a los trabajadores y trabajadoras, pues la gran mayoría, casi un 80% de los afiliados, a acumulado 100 cotizaciones o menos, de las 360 cotizaciones requeridas para tener derecho a una pensión; por lo tanto, esta mayoría probablemente no podrá acceder a una pensión; y la minoría que eventualmente podrá a acceder a una pensión (menos de un millón de cuatro millones de afiliados), recibirá una pensión de miseria, proyectada en 23% de su último salario; es decir, aquel que, por ejemplo, gana 10,000 pesos, sería pensionado con solo 2,300 pesos. Y esto sucede cuando las AFP han obtenido ganancias record el año pasado (casi 6 mil millones de pesos); y entre 2004 y 2019 se han ganando casi 40 mil millones de pesos”
La sociedad Dominicana padece de una fallas histórica en lo que corresponde con nuestro sistema educativo y producto del mismo hay temas de interés general que no son desarrollado con la profundidad que ameritan, además que los debates en los mismo no salen de los escenario académicos y grupos pequeños de incidencias, en sentido me gustaría que le digas a los lectores y lectoras ¿que son las administradora de fondos de pensiones ( AFP ),como se logra establecer ese modelo en nuestro País y quiénes son los principales propulsores del mismo ?
En primer lugar, gracias por la entrevista y por permitir que podamos compartir con nuestros hermanos y hermanas del Sur nuestras posiciones y valoraciones sobre el sistema de pensiones vigente. Lo cual hacemos con el propósito de compartir conocimientos, fomentar el debate sobre temas de interés general, aportar a la toma de conciencia informada de la ciudadanía y promover así el empoderamiento del Pueblo para la defensa de sus legítimos derechos y el bienestar de todos y todas.
Las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) son empresas con fines de lucro, en su gran mayoría privadas (AFP Reservas es de propiedad pública), que se encargan de administrar e invertir los fondos que acumulan los trabajadores y trabajadoras mediante las contribuciones a la seguridad social, para aspirar, con estos fondos acumulados, a una pensión cuando cese su vida laboral.
El modelo de pensiones de capitalización individual instaurado en 2001 mediante la Ley de Seguridad Social No. 87-01, se logra imponer mediante proceso de grandes discusiones y lucha de intereses iniciado a mediados de la década de los 90’s entre los que propugnaban por un verdadero sistema de seguridad social, solidario y humano versus aquellos que vieron una gran oportunidad de negocio seguro en privatizar la salud y las pensiones; estos últimos fueron principalmente la clase política que dirigió el país en esos años, la banca privada nacional y organismos financieros internacionales (como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo).
A pesar de que solo algunas centrales sindicales, un sector de la Asociación Médica Dominicana (hoy CMD), expertos y académicos se intentaban resistir a la imposición de un modelo de capitalización individual, triunfó en República Dominicana este modelo y nació la referida Ley que crea el Sistema Dominicano de Seguridad Social.
Entonces, planteas que las AFP son un nuevo modelo de administración de los fondos de pensiones, ¿Previo a este sistema cual era la forma en que los y las trabajadores dominicanos-as tenían para poder acceder a una pensión?
Previamente había un sistema supuestamente de reparto manejado por el Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS); sin embargo, era muy limitado y precario, es decir, no era de alcance nacional (abarcaba solo un 12% de la población o menos de 530 mil personas) y contaba con poco apoyo del Estado, característica esencial de los verdaderos sistemas de reparto, solidarios, que garantizan pensiones dignas para todos y todas.
Este es un país que vive de la información, todo mundo cree tener la respuesta correcta o ideal, el estado te vende sueños, los empresarios también y al final la gente es la que con impuestos termina asumiendo los endeudamientos, creo que toda la gente que nos lee quiere saber, ¿Cuál es la diferencia entre el sistema de Reparto-Hacienda y las Administradoras de fondos de Pensiones en la actualidad? Y qué sistema beneficia más o es más integral para los trabajadores y trabajadoras dominicanos?
En el sistema de capitalización individual, que es el que impera en nuestro país y solo existe en cuatro países de América Latina, el trabajador cotiza (junto con el empleador) en una cuenta individual que es administrada por las AFP, creando a así un fondo que iría creciendo por lo aportado por el trabajador y el empleador mes a mes y de la rentabilidad de las inversiones realizadas por las AFP con dichos fondos. Es un sistema donde la posibilidad de acceder a una pensión y el monto de la misma, dependen única y exclusivamente de la situación y evolución laboral del trabajador (solo del sector formal) y de las condiciones del mercado (rentabilidad de la inversión de los fondos). No hay beneficio (pensión) definido y, por lo tanto, la posibilidad de recibir una pensión en el futuro es incierta.
En el modelo de reparto, las pensiones se consideran como lo que son: un derecho fundamental. Hay, además de una contribución definida, que es tripartita, es decir, contribuye también, además del trabajador y el empleador, el Estado, a través de los impuestos que paga la población o del Presupuesto Nacional; hay también un beneficio definido, o sea una pensión garantizada. Para que se entienda mejor, en un sistema de reparto los trabajadores activos financian las pensiones de los trabajadores pasivos, es decir, aquellos que han cesado su vida laboral. Tomando como ejemplo el caso de una familia, el padre (mientras trabaja) y la sociedad financian la pensión del abuelo; y, así mismo, el hijo y la sociedad financian la pensión del padre cuando este se jubila. Esto se conoce con el nombre de la solidaridad intergeneracional.
El sistema de capitalización individual no beneficia a los trabajadores y trabajadoras, pues la gran mayoría, casi un 80% de los afiliados, a acumulado 100 cotizaciones o menos, de las 360 cotizaciones requeridas para tener derecho a una pensión; por lo tanto, esta mayoría probablemente no podrá acceder a una pensión; y la minoría que eventualmente podrá a acceder a una pensión (menos de un millón de cuatro millones de afiliados), recibirá una pensión de miseria, proyectada en 23% de su último salario; es decir, aquel que, por ejemplo, gana 10,000 pesos, sería pensionado con solo 2,300 pesos. Y esto sucede cuando las AFP han obtenido ganancias record el año pasado (casi 6 mil millones de pesos); y entre 2004 y 2019 se han ganando casi 40 mil millones de pesos´´
Históricamente y en la actualidad, el sistema de capitalización individual ha fracasado aquí y en los países donde se ha establecido.
En los 80’ con el Impulso de las políticas neoliberales la llegada de las AFP fueron parte del gran Bum- de la época, mas de 30 países decidieron modificar sus sistemas de Pensiones asumiendo la privatización de los mismos, evidentemente nada dura para siempre y a partir de los 90° inicio el debacle y estos países comenzaron nueva vez a modificar sus sistemas de pensiones y al día de hoy mas del 60% de los países en cuestión quieren optar por modelos mixtos o volver a la administración estatal. ¿A que crees que han respondido esas modificaciones que se han realizado en esos países? ¿La modificación realizada por el congreso nacional en Febrero 2020 guarda alguna relación con la situación de los demás países?
Esos países revirtieron la privatización de los fondos de pensiones y retomaron el modelo publico de reparto porque, como ya hemos dicho, ese modelo fracasó, al no garantizar cobertura universal y pensiones dignas para los trabajadores y trabajadoras. Por ejemplo, en este sentido, en Argentina existió, al igual que ahora en Chile y República Dominicana, un sistema de capitalización individual. Pero en 2008, ante el fracaso del mismo, los ciudadanos argentinos se movilizaron y demandaron uno nuevo. Fue así como en ese mismo año, bajo el gobierno de Cristina Fernández, se produjo una reforma previsional, instaurándose un sistema de reparto, tripartito y solidario. Con el modelo anterior, los argentino se jubilaban con apenas el 30% de su último salario y las AFP de ese país amasaban enormes fortunas a costa del sacrificio de trabajadores y empleadores; sin embargo, el nuevo sistema de pensiones argentino otorga pensiones que rondan el 70% del salario promedio y proyecta una tasa de reemplazo cercana al 80%.
Las estadísticas demuestran que las pensiones presentes y proyectadas de los sistemas de reparto son mucho mayores que las que pueden otorgar los sistemas de capitalización individual. Esto, aunado al gran negocio que representa para unos pocos grupos financieros que obtienen unas enormes ganancias parasitarias, ha llevado a la gran mayoría de países que hay inventado con este modelo neoliberal (privatizador y de mercado) a desmontarlo y establecer un sistema de pensiones público, universal y solidario.
Demostramos con datos oficiales que la “reforma” al sistema de pensiones aprobada por el Congreso Nacional en febrero pasado, lejos de reducir las ganancias de las AFP, lo que hará será aumentarlas de forma creciente y segura. Más bien se trató de una simple modificación de la Ley a favor de las AFP, y no una reforma sustancial y profunda que beneficie a trabajadores y trabajadoras.
En un país donde prima el trabajo informal y los puestos más precarizados corresponden en más de un 60% a mujeres, ¿como las visualizas dentro de este sistema? ¿Se tienen estadísticas de cómo son afectadas las mujeres por este modelo excluyente y cuantas mujeres aproximadamente están afiliadas y cotizando en relación a los hombres?
Dadas las condiciones del mercado laboral, donde la gran mayoría de trabajadores y trabajadoras reciben bajísimos salarios y sufren sobreexplotación, con baja estabilidad laboral, con alto nivel de desempleo y subempleo, condiciones de trabajo precarias, el modelo de capitalización individual es aún más desastroso. Y por una cuestión de desigualdad de género, que se manifiesta a todos los niveles de la vida social, en el mercado laboral por lo general las mujeres resultan ser las más afectadas por participar menos que los hombres en la población económicamente activa y recibir menores salarios; por lo tanto, es muy probable que las mujeres sean aún más afectadas que los hombres bajo este modelo de pensiones mercantil y privatizador. Un caso muy claro en este sentido es el trabajo doméstico, que en un 97% (253,286 personas) pertenece a la economía informal, es decir sin seguridad social; y de este porcentaje, el 94% (238,068) es ocupado por mujeres.
Para realizar esta pregunta me gustaría citar unos datos que aparecen en un estudio del cual tú eres coautor que realizo La Juan Bosch, que se titula: Del Negocio Seguro a la Seguridad Social, ´´ Según datos suministrados por la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL), entre 2007 y 2018 las ARS privadas han obtenido beneficios totales por un valor de 12,696.2 millones de pesos. Esto quiere decir que, gracias a las contribuciones e impuestos que mes tras mes pagan trabajadores y empleadores por el Seguro Familiar de Salud (SFS), las ARS privadas, como administradoras de estos recursos, se han asegurado, en promedio, beneficios anuales superiores a los 1,000 millones de pesos´´´ ¿Cual es la relación existente entre las AFP y las ARS?, en esa misma intervención nos pudiera abordar sobre cómo afecta las ARS el derecho a la salud del pueblo dominicano?
Las ARS son otra la otra cara del mal llamado sistema de seguridad social. Éstas, en vez de lucrar con los fondos de pensiones como lo hacen las AFP, lucran con la salud de la gente, con la enfermedad de la gente, con reducir o negar la cobertura de los servicios de salud a la población, disparando así los pagos directos de que tiene que hacer los dominicanos y dominicanas para recibir atenciones de salud; pagos de los cuales la gran promesa era que iban a reducirse con la entrada de las ARS, y sin embargo hoy, de cada 100 pesos que gasta la población por recibir servicios de salud, 45 pesos tienen que salir de su propio bolsillo. Y mientras se niega el derecho a una salud suficiente, digna y de la calidad; las ARS, al igual que las AFP, amasan enormes fortunas gracias al esfuerzo de trabajadores y empleadores.
Este sistema de AFP, tiene más de 16 años de administración de fondos de pensiones de los/as trabajadores/as, en dónde se han acumulado miles de millones de pesos, los cuales están invertidos en diferente instituciones públicas. ¿Qué tan factible es que los fondos de los/as trabajadores/as estén invertidos en la esas instituciones y en termino reales a cuantos millones de pesos ascienden esas inversiones actualmente?
La propia Ley de Seguridad Social establece que los fondos de pensiones deben invertirse prioritariamente en inversiones productivas e inclusivas, desde el punto de vista social y económico, como puede ser la construcción de viviendas e infraestructuras. Sin embargo, la inversión de los fondos de pensiones por parte de las AFP se realiza bajo un esquema improductivo, especulativo y de saqueo de los recursos de todos, sobre la base de los impuestos y préstamos a los dominicanos con sus propios ahorros; permitiendo a la vez ganancias parasitarias para unos pocos grupos financieros, con riesgo casi insignificante, a costa del presupuesto nacional y del esfuerzo colectivo. En la actualidad, el 77.5% de los fondos está colocado en instituciones o entidades públicas, equivalente a más de 432 mil millones de pesos.
¿En la actualidad que cantidad de trabajadores están afiliados a la seguridad social, y cual es monto que se han ganado las AFP desde el inicio de sus operaciones?
Existen poco más de 4 millones de afiliados, pero solo el 47% (menos de 2 millones) cotiza al sistema. Lo que da cuenta del fracaso del sistema en garantizar altos niveles de cobertura efectiva de la población. En el 2003 el 58.5% de los afiliados cotizaba y, como hemos ya señalado, ahora solo lo hace menos de la mitad.
Ya hemos referido que entre 2004 y 2019 las AFP han obtenido casi 40 mil millones de pesos por concepto de ganancias.
Me gustaría tener tu punto de vista sobre una propuesta que en los últimos días se ha virilizados si pudiera llamarse así y es la idea de que a raíz de la crisis creada por la situación sanitaria del Covid-19, sean liberados el 30%, de los fondos ahorrados de los/as trabajadores/as que tienen las AFP.
Es una propuesta que nace de la indignación de la ciudadanía ante sistema de pensiones injusto y fracasado, que solo beneficia a una minoría, a unos cuantos grupos financieros. Vale decir que en medio de un ambiente pre-electoral y de campaña política, este tema está siendo utilizado y explotado de forma demagógica por políticos oportunistas que buscan congraciarse con la simpatía de los electores; cuando en el fondo, como explicaré más adelante, esta medida perjudicaría a los trabajadores y trabajadoras.
Al margen de valorar la discusión que se ha estado dando últimamente sobre el impacto macroeconómico que podría significar dicha medida (inflación, devaluación del tipo de cambio), en todo caso, es injusto que la solución de la crisis caiga sobre los hombros de los propios trabajadores y trabajadoras. La gran mayoría de los afiliados al sistema de pensiones tienen muy pocas cotizaciones y, como es sabido, sus salarios son muy bajos, por lo que es poco el dinero que tienen ahorrado en su fondo de jubilación. Lo más justo y razonable es que al menos la protección económica de trabajadores y trabajadoras en medio esta crisis sea financiada por las AFP, a través de un bono mensual a los cotizantes que sea pagado con sus ganancias pasadas, presentes y futuras, propuesta que en días pasados 85 organizaciones dominicanas hicieron al país y a diputados y senadores a través de un comunicado y carta, respectivamente.
¿Cómo valora las medidas adoptadas por presidente de la república dominicana ante la situación de Cuarentena creada por la situación sanitaria del Covi-19?
Aunque hay que reconocer el esfuerzo que ha estado haciendo el Gobierno, pero, a partir de los hechos, valoro las medidas como insuficientes, tanto a nivel de cobertura como nivel del monto de la ayuda económica, y en la gestión de la pandemia. Por un lado, entiendo que deben ampliarse, fortalecerse y prolongarse los programas de ayuda económica (FASE, Quédate en Casa); haciéndolos llegar a más gente, en especial a los trabajadores y trabajadoras del sector informal, y elevando el monto de ayuda económica mensual, que actualmente es de extrema pobreza. Por otro lado, por una vez y por todas debe aumentarse considerablemente el número de pruebas diarias del Covid-19, ya que el nivel actual sigue siendo muy bajo a pesar de las promesas del Gobierno para aumentarlas, lo cual aún no ha logrado; así como también debe haber una intervención más activa del Gobierno en aras de garantizar que la ciudadanía que sale a las calles acate las normas de distanciamiento social, lo cual es prácticamente inexistente.
¿Qué hacer en sentido general para lograr una modificación 87-01, y que la misma se adapte a las necesidades de las grandes mayorías de la clase trabajadora y del pueblo dominicano?
Tenemos ya varios años proponiendo una reforma estructural y sustitutiva del actual sistema, esto supone la a instauración de un nuevo sistema, de reparto, de carácter público y solidario, que termine con los principios de la capitalización individual y el lucro administrativo, orientado realmente a la universalidad y la solidaridad como principios rectores, y que garantice por ley pensiones dignas.
*Autor es sociólogo