Si revisamos un poco la historia de Barahona en términos políticos, podemos darnos cuenta sin el mayor esfuerzo, de que en ocasiones, se ha votado por personas muy calificadas para los distintos puestos electivos, en función de su preparación académica, aunque como es lógico, también se ha votado de manera muy equivocada, al hacerlo por personas que no reúnen el mínimo de condiciones ni intelectuales ni morales para ocupar ciertos puestos.
Evaluando en términos generales los que han sido los resultados de la mayor parte de los que han ocupado puestos públicos, podemos ver que en la mayoría de los casos, han dejado mucho que desear, ya sea haciendo cosas indebidas o dejando de hacer las que realmente debieron hacer en cumplimiento de lo que les establecen dichas posiciones.
En esos grupos, muy pocos lo han hecho bien y resulta un poco difícil entonces poder definir a cual o cuales les toca la peor parte, si a los mejor o a los peor preparados en razón de que casi no se pueden establecer las diferencias.
Para las próximas elecciones congresuales y municipales, se presenta un panorama muy parecido al anterior ya que están fluyendo a raudales una serie de precandidatos que sin duda alguna puede definirse como sorprendente.
¿Están todos preparados o sea, capacitados para ejercer las funciones de los cargos a que aspiran?.
Esa pregunta la dejamos para que cada cual que desee, la responda ya que no nos interesa saber cuál es el parecer de cada uno en tal sentido.
Entendemos como bueno y saludable para Barahona, la aparición de esos prospectos ya que es una muestra de que se democratizan los sentimientos y que quizás sea este el inicio de una acción que permita romper las cadenas que por décadas han mantenido los Partidos políticos, que imponen a quienes más les conviene. (Más opciones, mayores esperanzas).
Sin embargo, a lo que si aspiramos es a que los que tengan la oportunidad de llegar a los puestos, se preparen para servir al pueblo desde los mismos y que no caigamos en las mismas penurias que por falta de capacidad y humanismo, siempre padecemos. Que pasen los mejores.
Por considerarlo de suma importancia, nos permitimos hacer un ferviente llamado al universo de precandidatos de todos los Partidos, en el sentido de que utilicen sus mejores recursos de la índole que sean, para que desarrollen una campaña con altura, dignidad y respeto entre sí y entre la población que verá y evaluará sus actuaciones en los distintos escenarios.
Que nadie aproveche para hacer su campaña, recursos bajos como pudieran ser debilidades o falencias de los demás, sino que pongan en ejercicio sus cualidades personales, de manera que esto pueda hacerlos crecer y ser justamente evaluados por el pueblo quien en definitiva será quien tendrá la oportunidad de elegir y que nunca optará por elegir sino lo mejor.
¡Una campaña limpia, participativa, objetiva y que tenga as mejores propuestas para que el pueblo tenga la oportunidad de sopesar y elegir: entre el llanto y la incertidumbre y la sonrisa y el verdadero progreso y un sano desarrollo!.