Luego de dos meses confinados habitantes de lan ciudad Wuhan, foco de la epidemia de COVID-19, volverá a la libertad: el gobierno levantará las restricciones a los desplazamientos el próximo 8 de abril, anunciaron las autoridades este martes.
La medida se aplicará al resto de la provincia de Hubei a partir del miércoles 25 de marzo. Al principio solo los habitantes considerados sanos podrán desplazarse libremente.
«A partir de la medianoche del 25 de marzo los controles de tráfico al salir de Hubei serán eliminados, con la excepción de Wuhan», indicó el aviso y señalan que el número de nuevos casos en Hubei disminuyó drásticamente en los últimos días, registrando tres completos sin un caso de transmisión local.
Esta zona, poblada por 56 millones de habitantes, fue puesta en cuarentena a finales de enero. Pero las restricciones se han levantado progresivamente desde la visita en marzo del presidente Xi Jinping.
El número de nuevos casos fue muy bajo durante las últimas semanas en Hubei, aunque este martes el ministerio de Salud informó de un contagio adicional en Wuhan.
El código QR
Las personas que quieran entrar o salir de Hubei o Wuhan podrán hacerlo, siempre que presenten un código QR «verde» en el teléfono móvil. Lo emiten las autoridades y certifica que no está infectado con el nuevo coronavirus.
Las escuelas permanecerán cerradas.
A nivel nacional, China informó el martes de 78 nuevos casos de COVID-19, 74 de los cuales son de personas que llegaron del extranjero, lo que hace temer una nueva ola de infecciones, así como 7 fallecimientos, todos ellos en Wuhan, según el saldo oficial del ministerio de Salud.
Han sido detectados 427 casos importados en China. Casi todas las nuevas infecciones en suelo chino son de personas que regresan o vienen del extranjero, ahora que la epidemia parecía estar bajo control en el país.
Visitantes en cuarentena
Muchas ciudades han adoptado reglas estrictas para poner en cuarentena a los recién llegados, como Pekín.
Desde el lunes, todos los vuelos internacionales con destino a Pekín deben detenerse primero en otro aeropuerto chino, donde se somete a los pasajeros a pruebas médicas.
Las autoridades de Pekín anunciaron el martes que cualquier persona que llegue a la ciudad será sometida a una prueba de detección biológica a partir del miércoles.
Con más de 80.000 casos y 3.277 muertos registrados oficialmente, China es el segundo país más afectado en el mundo por el nuevo coronavirus después de Italia.