El canciller alemán Olaf Scholz criticó la exigencia del presidente de Estados Unidos Donald Trump para que Ucrania suministre a Estados Unidos minerales valiosos a cambio de su apoyo continuo, calificando su postura de “muy egoísta”.
Trump, sugirió el lunes que Estados Unidos debería exigir acceso a los recursos de tierras raras de Ucrania como condición para la asistencia militar de Washington, que hasta ahora asciende a decenas de miles de millones de dólares.
Afirmó que Estados Unidos ha proporcionado más ayuda militar y económica a Ucrania que las naciones de la UE, y agregó: «Estamos buscando hacer un acuerdo con Ucrania donde ellos asegurarán lo que les estamos dando con sus tierras raras y otras cosas».
Sin embargo, la idea provocó fuertes críticas por parte de Scholz, quien sostuvo que “sería muy egoísta y egocéntrico” utilizar los recursos de Ucrania para financiar el apoyo a la defensa. En cambio, el canciller dijo que las ganancias de los metales de tierras raras deberían utilizarse para la recuperación de Ucrania tras el conflicto.
«Se trata de que Ucrania pueda financiar su reconstrucción», subrayó Scholz el lunes después de una cumbre informal de la UE en Bruselas.
“Son tareas enormes si tenemos en cuenta la enorme destrucción que ha causado. Por eso, los recursos del país deberían destinarse a financiar todo lo que se necesite después de la guerra”.
Ucrania posee importantes reservas de minerales de tierras raras, incluidos litio, titanio y grafito, que son esenciales para diversas industrias de alta tecnología.
Los comentarios de Trump se produjeron después de que el propio líder ucraniano, Vladimir Zelenski, manifestara su disposición a colaborar con los países occidentales en lo que respecta a estos recursos. Uno de los puntos de su llamado “plan de la victoria” incluye la perspectiva de un acuerdo especial con los países occidentales, incluido Estados Unidos, “sobre la protección conjunta de los recursos críticos disponibles en Ucrania, la inversión conjunta y el posterior uso del potencial económico correspondiente”.
En noviembre, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó que las autoridades estadounidenses quieren controlar Ucrania debido a su enorme potencial económico. “Hay una lucha por los recursos y, en última instancia, una lucha por la influencia”, afirmó.
Lavrov subrayó que Rusia no lucha por los recursos de Ucrania, sino por su población. “Nos preocupamos por la gente, no por los recursos naturales que algunos estadounidenses quieren apropiarse para sí y quieren que los ucranianos sean sus sirvientes y se queden sentados sobre ellos”, afirmó.