A la pena de 8 años de prisión condenó el Primer Tribunal Colegiado de Santiago a un hombre hallado culpable de abuso sexual y psicológico en perjuicio de una menor de 15 años de edad, a quien amenazaba de muerte, además de golpearla para que se grabara desnuda para enviarle el contenido pornográfico el cual luego distribuía el condenado.
La Fiscalía de Santiago, quien obtuvo esta condena, señala que los hechos tuvieron lugar desde que la víctima, de quien se omite su nombre para proteger sus derechos fundamentales, tenía 12 años, tiempo en el que M.M.Ch, sedujo y convenció de sostener un noviazgo.
La representante de la Fiscalía de Santiago, Yarily Toribio, expresó a los jueces del Primer Tribunal Colegiado que el agravio cometido en perjuicio de la menor afecta su desarrollo integral y psicosexual, lacera su dignidad y supone un trauma para su vida, en tanto que fue sometida a experiencias que no se corresponden con su edad ni sus intereses.
Al paso del tiempo, el acusado mostraba una actitud violenta contra la adolescente a la que obligaba a desnudarse, para que se grabara y le enviara el contenido pornográfico, ordenandole hacerlo con las especificaciones de poses, tipo de ropa y horas específicas en que debía enviarle.
La relación circunstanciada de los hechos establece que una vez los padres de la menor descubrieron las conversaciones de esta con el acusado, intervienen para que el adulto se aleje y no la moleste, pero, por el contrario, el condenado arreció la persecución y actitud violenta hacia la menor.
Los informes establecen, que, en varias ocasiones interceptó a la víctima, en varios lugares y la agredía físicamente, además, de amenazarla con publicar el contenido en fotos y videos que por medio de amenazas le solicitaba.
Violencia y control psicológico
En el relato que detalló ante el juzgador, el Ministerio Público establece que el acusado tenía control de la ropa que debía vestir la víctima, le daba instrucciones de cuál fotografía subir a sus redes sociales, le prohibía reunirse con sus amigas y salir de su casa sin antes obtener su permiso.
La Fiscalía de Santiago, habiendo obtenido resultados de la experticia forense digital, debidamente autorizada bajo la orden número 01426-2023, obtuvo evidencias de que Mera Chávez incurrió en la producción, difusión, adquisición y posesión intencional de pornografía infantil.