Familiares de un comerciante que supuestamente se suicidó de un disparo en la sien cuando la policía, acompañada del Ministerio Público acudió a su casa, ubicada en el sector Invi-Cea, Villa Central, negaron su pariente se suicidara como establecen las autoridades y, en cambio, afirman este fue ejecutado por quienes acudieron a su vivienda con el aparente objetivo de ejecutar una requisa a su domicilio.
Así lo afirma Heleno Rodríguez, Lourdes Espinal (hermanos) y Edwin Rodríguez (sobrino), a periodistas locales en rueda de prensa en la residencia del occiso, lugar en donde ocurrió la tragedia la madrugada de este miércoles 21 de agosto del presente año 2024.
El allanamiento, que por parte de la policía participó el teniente coronel Reinaldo Roque Capellán, subdirector Regional Sur, encabezado las fiscales Claudia Enerolisa Féliz Batista y Yolanda Cristina Pérez, familiares del comerciante Aurelio Antonio Rodríguez (nativo de Santiago), afirman que la explicación que le ofrecen, tanto la policía como la fiscalía no concuerdan con la escena del supuesto suicidio.
“Mi hermano no tenía motivos para quitarse la vida: no tenía problemas con nadie, no le debía a nadie, un empresario prospero, la justifica vino a realizarle un supuesto allanamiento, dicen que se identificaron, penetraron a la casa, las fiscales dicen que él se atrincheró en su habitación y que escuchó un “pun” cuando le pedían entregarse porque vinieron hacer una requisa por porte de armas ilegales”, explica Heleno Rodríguez, hermano de la víctima.
Además, reveló que una de las fiscales actuantes en el allanamiento le informa que ella penetró a la habitación cuando escuchó el “pun”, no un disparo, encontrando a su hermano con el disparo que supuestamente este se hizo con fines suicidas.
El pariente del comerciante, dijo que dada la explicación de las autoridades sobre el suceso acude a la habitación, pero la almohada que supuestamente se colocó en el área que se da el disparo está intacta, hay un disparo en la persiana más arriba de su cuerpo.
“El cuerpo quedó en un lugar, el disparo está por otro, se observa una silla que no estaba, más tenemos fotografías con el cuerpo en donde hay una silla llena de sangre, es decir, esa escena ha sido montada en su totalidad, porque una persona con fines suicida no le alcanza el tiempo para buscar una almohada porque si me atrinchero, comienzo a disparar a las autoridades o me doy un tiro y nada de eso ocurrió”, dice su hermano.
Indicó que el cuerpo está en un lado, impacta en la persona, sale por el zinc, el vecino más próximo no escuchó ni vio nada, tampoco los demás, no hay rastros de sangre cuando sacan el cadáver, aumentando aún más las dudas de sus familiares.
En ese sentido, Heleno Rodríguez, reafirma que a su hermano comerciante lo ejecutó la policía actuante en el supuesto allanamiento en presencia del Ministerio Público, quien no solo es quien encabeza el operativo, sino que es al órgano persecutor a quien corresponde garantizar el derecho de la ciudadanía, ya sea esta víctima o victimaria.
Esperaba –dijo- encontrar todo “revuelto” en la vivienda “porque se trataba de un allanamiento”, sin embargo, afirma que para su “sorpresa” todo está “intacto” en la casa, reafirmando se está ante el montaje de una escena para hacer creer una realidad inexistente sobre los hechos.
“Para una persona darse un tiro tiene que tener problemas económicos, familiares, de muchas otras índoles, no cuando usted está en su trabajo, progresando, con muchos proyectos, con mucha ambición, porque la noche antes conversamos y teníamos proyectos familiares que íbamos a emprender juntos para decirme a mí que a las 5 de la mañana del día siguiente él se dio un tiro para suicidarse”, indicó.
Él tiene familia
La familia Rodríguez, indicó que, de igual modo, que se llevaron la cajita con el disco duro de la cámara de video vigilancia que la víctima tenía instalada en su vivienda, la cual le entregaron, pero no se observa nada de lo ocurrido.
Además, dijo se entregó a la familia una cantidad de dinero, unos 63,000.00 pesos en efectivo que supuestamente tenía el occiso, mientras no aparece un supuesto maletín propiedad del comerciante observado en las fotografías que sus parientes tienen en su poder.
En ese sentido, dijo que el caso no se quedará así, ya que el comerciante es un hombre de familia, por lo que en la próxima semana acudirán a la Procuraduría General de la República (PGR), a los fines solicitar una investigación profunda sobre este hecho que más que aclarar, lo que hace es crear dudas.
El hecho
Hasta el momento oficialmente la fiscalía ni la policía han ofrecido información acerca de este allanamiento que ha dejado como resultado la persona que iba ser allanada muerta, supuestamente al hacerse un disparo en la “sien”, con fines suicida.
Al allanamiento, efectuado a las 5:00 de la mañana del miércoles 21 de agosto, participaron miembros del DINTEL, agentes de Acción Rápida, dos fiscales, en atención a la orden judicial No. 2024-00065 emitida por La Oficina de Servicios Judiciales de Atención Permanente de Barahona, con el objetivo de buscar armas de fuegos y pertrechos militares, pero las autoridades no ha ofrecido detalles del hecho.
En la escena del supuesto suicidio, las autoridades ocuparon una pistola marca Taurus, calibre 9 mm, con su cargador y varias cápsulas, con la cual alegadamente la víctima se hizo el disparo, una escopeta calibre 12, sin numeración y marca, con 6 cartuchos, una canana, una gorra militar con rango de coronel de la FARD, con el apellido Genao.
Además, indican que al revisar el vehículo, tipo minibús, marca NISSAN, color blanco, placa I113172, encontraron en la gaveta del conductor RD $ 63,850.00 pesos en efectivo, en la cartera de la víctima, 2 carnet militar de la ARD, una cédula militar a su nombre, dos cédulas civiles, una licencia de conducir, 2 tarjetas de débito, 3 de crédito y un carnet de la compañía de seguro Ars Humano.