República Dominicana, necesita de un “nuevo rumbo” en lo económico, social, político y cultural, sobre todo, el Estado ponga su atención en garantizar los derechos fundamentales de la población, no en satisfacer los intereses de los pequeños grupos políticos y empresariales privilegiados, los cuales “viven en el derroche” a costa de todo un país.
Así lo afirma la Coordinadora Nacional Popular (CNP), al realizar vigilias y encendidos de velas simultáneamente en el Parque Independencia (Distrito Nacional) y diversas comunidades del país.
Denuncia, víspera de la toma de posesión del nuevo período de gobierno, que el presidente Abinader y su partido se empecinan en un conjunto de reformas para “ampliar y preservar los privilegios de las minorías”, cuando protestan por sus derechos.
“Porque decenas de miles de familias pobres sufren desalojos en Los Alcarrizos, Nuevo Jerusalén, Casino Segundo, Las Malvinas, Santo Domingo Norte, Valiente, La Caleta, Andrés Boca Chica, así como en otros puntos del Gran Santo Domingo, provincia Duarte, Santiago Rodríguez, San Pedro de Macorís, entre otras.
Citan el caso del municipio Tamayo, provincia Bahoruco, próximo a la Presa de Monte Grande, igual en San Juan, así como decenas de comunidades campesinas que encienden velas “porque el actual gobierno no cumple sus promesas de entrega de tierra, agua y servicios”.
Al mismo tiempo –indica- el actual gobierno, junto a empresas mineras, se empeña en destruir nuestras fuentes de agua y vida escarbando oro y otros minerales en la Cordillera Central, el Bahoruco Oriental, la Linea Noroeste y prácticamente en todo el país.
Las movilizaciones se efectuaron este martes 13 de agosto en Bonao, San Francisco de Macorís, Santiago, Moca, Navarrete y otras comunidades del Cibao. “Encienden velas y se movilizan, porque mientras las elites anuncian sus nuevos planes de privatizaciones, fideicomisos, alianzas publicas privadas, las comunidades sufren”.
“Porque el gobierno firma acuerdos que no cumple, mantiene una política de dejar hacer y dejar pasar al gran empresariado que encarece la energía eléctrica, los servicios y el costo de la vida a niveles inalcanzables y al mismo tiempo quiere imponer proyectos contaminantes, que resultan lesivos para el país como la nueva presa de cola en Cotuí o las hidroeléctricas de Las Placetas y Santiago Rodríguez, que destruyen nuestros ríos”, afirma.
La CNP, que agrupa a decenas de organizaciones sociales, campesinas, sindicales, estudiantiles, ambientales, sociedad civil, de jóvenes, mujeres, entre otras, dijo que en cuatro años el presente gobierno se ha negado a terminar con el derroche y la corrupción en la administración pública.
“Se hace cómplice con grandes escándalos de corrupción como punta Catalina, se resiste acabar con los barriles, cofres, exoneraciones, exenciones fiscales y ahora, se empeña en reformas retrogradas como las que intentó con el nuevo código penal y otras a favor de los ricos, como las proyectadas reformas constitucional, laboral, fiscal, de seguridad social y otras”, expone.
Sostiene, asimismo, que con la contundencia que el momento requiere que, al movilizarlos y encender velas en víspera de un nuevo periodo de gobierno, que pretende continuar “con más de lo mismo”, la población pobre por las políticas de las élites y el gobierno empresarial, le envía un claro mensaje a los grupos de poder económico y político.