La frontera que comparten República Dominicana y Haití, es «celosamente» vigilada por soldados del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront), como parte de las acciones de seguridad para hacer frente a «cualquier amenaza» que surja por la violencia que se vive en el país vecino.
Sin embargo, el Cesfront, conforme a un cable de la Agencia de Noticia Española (EFE), informó este domingo que la zona fronteriza está en «calma», luego de la última escalada de violencia en Haití.
“Se toman todas las medidas, trabajamos coordinada y conjuntamente con el Ejército en el control de los pasos fronterizos formales y toda la franja fronteriza terrestre”, aseguró el organismo castrense de la República Dominicana.
Informpó que “son bien riguroso” con medidas anteriormente adoptadas en la zona limítrofe, en tanto que, explicó que el control de la frontera, especialmente estricto desde la crisis bilateral que generó la construcción en la parte haitiana de un canal en el Masacre, que en septiembre llevó a las autoridades dominicanas a incrementar la presencia militar en Dajabón (noroeste del país).
La frontera de República Dominicana con Haití es un punto especialmente sensible ante la situación que vive el vecino país, donde la violencia se ha disparado aún más desde el pasado jueves, tras conocerse que el primer ministro haitiano, Ariel Henry, se comprometió a celebrar elecciones antes del 31 de agosto de 2025.
Tras dos días de tiroteos y ataques por parte de las bandas armadas que controlan gran parte de Puerto Príncipe y otras zonas del país, la máxima tensión se vivió la pasada anoche cuando esos grupos asaltaron la Penitenciaria Nacional, en la capital, de donde escaparon numerosos y peligros delincuentes e importantes jefes de las bandas armadas que estaban en prisión.
Haití está a la espera del despliegue de una misión multinacional de apoyo a la seguridad que ayude a poner freno al terror que imponen las bandas con sus matanzas, secuestros, violaciones y ataques, preicisamente en esa gestión está en Nairobi, Kenia, el primer ministro Henry.