Sandra Torres Casanova, candidata a la Presidencia por la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y Bernardo Arévalo de León, del Movimiento Semilla, se disputarán la Presidencia de Guatemala en balotaje, en unas elecciones donde destacó el voto nulo y el abstencionismo.
El 17,39% de votos nulos supera la votación que alcanzó la candidata de UNE en las elecciones generales en Guatemala, con el 97.4% de las actas escrutadas (1119. 219). Los votos en blanco quedó en 382,392 (6.9%) a las 06H24 hora local (12H24GMT).
Torres, de acuerdo con el conteo oficial de Tribunal Supremo Electoral (TSE), logró 857.482 (15.68%), mientras Arévalo de León consiguió 648.704 votos (11.86%).
La segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Guatemala está prevista para el 20 de agosto próximo y, según ambos candidatos están listos para afrontar el reto.
Durante la jornada electoral se registraron irregularidades y algunos incidentes de violencia. San José del Golfo, al noreste de la capital, fue suspendida la votación, así como en San Martín Zapotitlán, al sur de Ciudad de Guatemala, según la entidad electoral.
El pueblo de Guatemala ha planteado su inconformidad política por medio de los votos nulos y algunos focos de conflictividad, los cuales marcaron panorama electoral de este domingo.
Para analistas locales, los votos nulos y blancos, que juntos superan toda la votación, es un signo de la descomposición del sistema político en el país centroamericano en el marco de una crisis económica latente.
Según expertos, la elevada cantidad de votos nulos es también el reflejo de la apatía de la población guatemalteca con la clase política, aunque sin llegar al 50 % de los votos nulos necesarios que hubieran obligado a repetir los comicios, como establece la ley guatemalteca.
En conversación con la plataforma multimedia teleSUR, Edie Cux, abogado y Notario con 10 años de experiencia en la defensa de derechos fundamentales de comunidades en situación de vulnerabilidad,
El también director del capítulo local de la ONG Transparencia Internacional detalló los grupos que habían perdido con las investigaciones de la CICIG (Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala) «regresaron con mayor fuerza».
«Se está consolidando un régimen, no una dictadura tradicional, sino una dictadura corporativa, que es mucho más peligrosa porque no hay una figura visible», comentó.
Sobre las elecciones, criticó la falta de resultados a la hora prometida y sostuvo que el voto nulo superó a los obtenidos por los candidatos por separado, en una critica al sistema que hemos tenido en los últimos tres años.
Explicó que la regresión en la lucha contra la corrupción tras la salida de la CICIG fue uno de los momentos más decepcionantes para el pueblo guatemalteco, después a los avances obtenidos en la materia, aunado a la crisis provocada por la Covid-19, que se mostró en el total rechazo en estas elecciones.
También fue significativo la votación para un partido de izquierda, Semilla, nacida de la lucha anticorrupción en Guatemala en 2015 , cuyo candidato Bernardo Arévalo de León obtuvo este lunes un inesperado segundo lugar en las elecciones presidenciales de Guatemala,
Perfil de Sandra Torres
Torres, quien adelanta la votación que se desarrolló este domingo, obtuvo hace cuatro años, en las elecciones de 2019, 1,1 millones de votos en la primera vuelta pero sucumbió en la segunda ante el actual presidente, Alejandro Giammattei.
La misma historia había vivido Torres en 2015, cuando perdió en segunda vuelta contra el comediante Jimmy Morales, presidente entre 2016 y 2020.
Es por ello que la exesposa del expresidente Álvaro Colom Caballeros espera que el 20 de agosto, ante el candidato de izquierda Bernardo Arévalo, pueda llegar finalmente a la presidencia del país.
Es licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), y tiene una maestría en políticas públicas por la Universidad Rafael Landívar.
Sus primeros años de estudio los realizó en Petén y Belice, lo que le permitió aprender el idioma inglés. Además, habla quiché.
Durante los últimos 23 años Sandra Torres se ha dedicado a la vida política al frente de la UNE y sus ingresos personales provienen del alquiler de bodegas, señalan personas cercanas a la candidata.
Antes de dedicarse a la política, Torres fue propietaria de maquilas en Mixco. Ahora renta esos locales. Los gastos de su campaña electoral que incluye movilizaciones, los cubre el partido, indican fuentes cercanas a la presidenciable.
Bernardo Arévalo de León
El sociólogo y diputado Bernardo Arévalo, quien dio la sorpresa en la primera vuelta, es hijo del presidente Juan José Arévalo (1945-1951), quien dejó huella en el país.
Sobre sus espaldas recae el legado de su padre, quien se convirtió en el primer presidente democrático después de décadas dictatoriales y poner fin a los 13 años del caudillo Jorge Ubico.
Nació en Montevideo, Uruguay, en 1958 debido al exilio de su padre en Suramérica y Francia luego que fuera derrocado Jacobo Árbenz en 1954 por una invasión fraguada por Estados Unidos.
Diputado por el partido Movimiento Semilla. Fue embajador de Guatemala en España entre 1995 y 1996, y viceministro de Relaciones Exteriores entre 1994 y 1995.
Arévalo de León ha integrado en el Congreso las comisiones de Relaciones Exteriores, Derechos Humanos, Asuntos de Seguridad Nacional, Integración Regional, Previsión y Seguridad Social, Gobernación y la de Educación, Ciencia y Tecnología.
También fue viceministro de Relaciones Exteriores en 1994 y 1995 durante el gobierno de Ramiro de León Carpio; ese mismo último año fue condecorado con la Orden del Águila Azteca por el expresidente mexicano, Ernesto Zedillo.
Entre 1984 y 1988 fue Primer Secretario y Cónsul de la Embajada de Guatemala en Israel, por mencionar algunos de sus cargos en la gestión pública.
En las próximas horas el Tribunal Supremo Electoral guatemalteco hará oficiales los resultados para la elección de 160 nuevos diputados al Congreso, 20 legisladores al Parlamento Centroamericano y 340 alcaldías municipales.