Una semana después de que bandas amarnadas atacaran el puerto e instalaciones de Les Moulins d’Haiti, Estados Unidos envió un guardacostas a aguas cercanas a Puerto Príncipe.
La presencia de la Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG), se realiza a pedido del gobierno haitiano, mientras la violencia que provocan las pandillas sigue causando estragos en el país.
El gobierno de Ariel Henry solicitó en nombre de Haití el despliegue en territorio nacional de Haití una fuerza armada especializada, por lo que la presencia del buque de la marina estadounidense se considera una primera respuesta de este compromiso internacional.
Desde principios de la década de 1980, la Guardia Costera de los EE. UU. patrulla aguas territoriales haitianas, acciones que coordina con sus contrapartes haitianas, concretamente por el tráfico de drogas y represión de viajes clandestinos.
Este miércoles el subsecretario de Asuntos del Hemisferio Occidental de los Estados Unidos en el Departamento de Estado, Brian Nichol’s, llegó a Puerto Príncipe a reunirse con actores del gobierno, políticos, representantes de la sociedad civil, empresarial, entre otros.
Se recuerda que el Consejo de Ministros de Haití, el jueves 6 de octubre, solicitó el «despliegue inmediato» de una fuerza armada especializada en Haití para detener la crisis humanitaria provocada, entre otras cosas, por la inseguridad resultante de las acciones de las bandas criminales y sus patrocinadores.