Benny Rodríguez
Falleció la mañana de este sábado en un centro médico de Santo Domingo y, luego, su cadáver será llevado a su residencia, ubicada en el municipio Neyba, provincia Barahona, Wilson Díaz, cuyo deceso causó pesar en su ciudad natal y toda la Región Enriquillo, dada su vinculación social con las comunidades de la zona Suroeste de República Dominicana.
Díaz, quien se caracterizó por desarrollar un trabajo a favor de las comunidades y contribuir con el empoderamiento del campesinado, falleció a los 69 años de edad, tras presentar desde hace algunos meses quebrantos en su salud.
El deceso del líder comunitario y campesino fue confirmado a #LaLupadelSur por Cástulo Ignacio Díaz (Kike), encargado de seguridad de la UASD Neyba, apéndice al Recito Barahona, quien informó que su progenitor presentó quebranto en su salud desde hacía algún tiempo.
Wilson Díaz, desde su juventud se organizó en las luchas sociales, campesinas y comunitarias, enrolándose en el Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (FELABEL), desde donde pasó a las filas del Movimiento Popular Dominicano (MPD), en su provincia Bahoruco.
Preocupado siempre por los problemas del campesinado de la región, junto a otros líderes de la provincia Bahoruco, constituyó y dirigió el Centro de Estudios de la Realidad Natural, Económica y Social de la Provincia Bahoruco (CERNES), entidad que hizo enormes contribuciones a favor de esa localidad.
Además, fue el forjador e impulsó las acciones para que se cree una extensión en Neyba de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), que finalmente se cristalizó con el Subcentro Neyba varios años después, en la entonces gestión rectoral de Franklin García Fermín.
Wilson Díaz, siempre mostró preocupación por el estudiantado de su comunidad, a los cuales organizó en el Felabel y otros espacios juveniles, desarrolló un intenso trabajo comunitario y político, a través del Movimiento Popular Dominicano (MPD), entidad en la que estuvo organizado durante décadas. A la hora de su fallecimiento, Díaz laboraba como técnico en el Distrito Educativo 1805 de Neyba.
Con su deceso la provincia Bahoruco, la Región Enriquillo y el país, pierden a un luchador de siempre, comprometido con las causas sociales de la comunidad, pero su espírutu de lucha estará siempre en los corazones de quienes conocieron su capacidad de entrega a favor de las mejores causas.