Haitianos cansados de tanta violencia y muerte, decidieron alzar su voz y este viernes vecinos de la llanura de Cul-de-Sac, sobre todo, los de los barrios más afectados por enfrentamientos entre grupos armados, decidieron dar un paso al frente para acabar con el fenómeno de inseguridad a la entrada norte de la capital.
Desde el cruce de Saint-Marc hasta el cruce de Shada, los vecinos recorrieron la pista este viernes para decir no a la inseguridad que causante de decenas de muertos, heridos y desaparecidos en el vecino país de República Dominicana.
La marcha de carácter pacífico, aunque no contó con la presencia de políticos, si logró que todos los estratos sociales de la zona participen de ella, así como de comerciantes de los mercados públicos de Bon-Repos y Seradòt, directores, alumnos y profesores de escuelas, profesionales, empresarios, entre otros, quienes manifestaron su hastío por la situación de inseguridad en que viven.
Según Jean Jonas Saint Juste, de los organizadores, la marcha busca decirle a la población de Cul-de-Sac que se levante y pida a las autoridades asumir su responsabilidad.
“Somos ciudadanos que pagamos nuestros impuestos. El Estado está en deuda con nosotros en términos de seguridad”, argumentó el exasesor del alcalde de Croix-de-Bouquets.
La llanura de Cul-de-Sac no se convertirá en un campo de batalla, dice Claudy Bien-Aimé, directora de la escuela. “Como inversionista, no puedes huir del área. O morimos todos juntos, o encontramos juntos la paz y la alegría de vivir de antaño”, dijo el empresario.
Al menos 75 muertos, entre mujeres y niños, 68 heridos y más de 9.000 desplazados, es el nuevo balance parcial de los enfrentamientos entre bandas rivales en la llanura de Cul-de-Sac, establece Naciones Unidas en una nota de prensa hecha pública ayer viernes 6 de mayo de 2022.
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