El obispo de la Diócesis de Barahona, monseñor Andrés Napoleón Romero Cárdenas, almorzó con al menos 85 personas envejecientes de toda la diócesis con motivo de la Navidad, comida organizada por las hermanas del “Perpetuo Socorro” de esta comunidad, lugar en donde ha sido levantado un hogar de ancianos, pero sin poder abrirse por falta de algunos procesos claves para su apertura.
Este hogar, el cual ha sido diseñado para acoger a 40 personas envejecientes, no ha podido abrir sus puertas por algunos desafíos -dice monseñor- como autonomía, pago de los sueldos, entre otros elementos.
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“Estamos dando los pasos de lugar para una vez que esté todo eso, poder abrir. Creemos que en enero y febrero ya aquí habrá internos también, como las personas mayores que nosotros vamos a acoger”, explicó monseñor.
Los adultos mayores, en su mayoría apoyados por sus bastones, con gorros que simbolizaban es Navidad, compartieron la alegría de una comida con motivo de las festividades navideñas y que la Diócesis buscar hacerle su vida más alegre, sobre todo, en este época especial del año.
Unas bonitas navidades
Monseñor Romero Cárdenas, aprovechó para desear a toda la Diócesis de Barahona, así como a todo el país unas “bonitas navidades”.
“Como siempre la Navidad nos invita a la solidaridad y este encuentro que tenemos hoy es un símbolo de eso. Aquí tenemos convocados a 85 ancianos, con quienes vamos a celebrar la Navidad. Son las hermosas tradiciones de nuestros ancestros”, expuso.
Recordó que la Navidad es para el encuentro, “para el encuentro con Jesús, razón por la cual invitó a celebrar esta época especial con el sentido que esta tiene y debe tener.
Recordó que Jesús está presente en quienes sufren, en los abandonados, en los que no tienen casa, en aquellos que están hospitales o en quienes nadie se acuerda de ellos: “ahí nosotros podemos encontrar a Jesús”.
“Porque Él se hizo pequeño, frágil y vulnerable. En su momento no estaba en el centro; no estaba solo en las grandes plazas podemos encontrar a Jesús era por los caminos de Galilea: junto a los espíritus perdidos, junto a pecadores y marginados ante la tragedia”, expuso.
No nos sintamos ajenos al sentido común de la Navidad
El obispo de la Diócesis de Barahona, al encabezar el almuerzo con motivo de la época navideña con los adultos mayores, invitó, asimismo, toda la comunidad a que nunca se sienta ajena al sentido común de la Navidad.
“Si queremos encontrar a Jesús busquémoslo hoy; por eso la verdad es que podemos compartir lo que tú tienes: lo que el Señor te ha dado —tus bienes materiales— además de pensar en aquellos otros que no tienen”, expuso.
También, la máxima autoridad de la Iglesia Católica en la zona, dijo que deben estar presentes nuestros dones espirituales: la paz, la alegría y el amor.
“Hay personas con necesidad de ello dentro de tu corazón, que solo quieren un abrazo tuyo, un saludo, incluso, un regalito; quieren compartir contigo ese cariño especial”, indicó.
Seamos mensajeros de esperanza
También, el obispo de Barahona, nos invitó a que en esta Navidad seamos “mensajeros de esperanza” y recordó que este es un año especial, por la convocatoria del Papa a toda la Iglesia, al jubileo de 2025.
“Que es el Jubileo de la Esperanza. Peregrinos de la Esperanza, nos invita el Santo Padre a ser todos nosotros, tenemos que convertirnos en mensajeros de esperanza”, invitó.
¿Cómo yo me puedo convertir en un mensajero de esperanza, en un peregrino de esperanza para los demás? No tan solo esperar esa realización, nosotros guardamos con fe, pero el Hijo de Dios me quede hoy, y en la realidad donde estamos, tenemos que tener presente la esperanza”, afirmó.
Reitero su petitorio a favor de toda la familia de esta Diócesis como de todo el país, a que el Señor regale en esta Navidad “mucha paz, mucha alegría”, sobre todo, a que “sepamos compartir”.
Invitó a los abuelos, padres y madres a no dejar de sar este consejo a los hijos estas navidades: “son hermosas, son fiestas para celebrarlas, pero no nos desbordemos, no nos pongamos en riesgo, lo más bonito que el Señor nos ha dado, que es nuestra vida, cuidémosla, cuidemos a los demás, tampoco nos manejemos embriagados”.