A casi una semana (miércoles 21 de agosto) en que según las autoridades se suicidó de un disparo cuando acudieron a practicarle un allanamiento en su residencia, ubicada en el sector Invi-Cea, Villa Central, Barahona, tanto la Dirección Regional Sur de la Policía Nacional como el Ministerio Público no han informado oficialmente lo sucedido esa madrugada con el hombre de negocio, nativo de la provincia Santiago.
Tampoco la Fiscalía ni la Policía se han referido a las graves acusaciones formulada por la familia del comerciante Aurelio Antonio Rodríguez (nativo de Santiago), de que él no se habría quitado la vida, alegando no tenía motivos aparentes para hacerlo, sino que las autoridades supuestamente lo habrían matado.
Heleno Rodríguez, Lourdes Espinal (hermanos) y Edwin Rodríguez (sobrino), dijeron a periodistas en rueda de prensa en la residencia del occiso, lugar en donde ocurrió la tragedia la madrugada de este miércoles 21 de agosto del presente año 2024, de que este habría sido muerto por las autoridades durante la requisa domiciliaria.
Sin embargo, autoridades competentes (Fiscalía ni Dirección Regional Sur PN), pese a la gravedad de los hechos y pese a los señalamientos de la familia de que lo habrían matado quienes actuaron en el allanamiento, no se refieren a ese hecho lamentable.
El hecho
Hasta el momento oficialmente la fiscalía ni la policía han ofrecido información acerca de este allanamiento que ha dejado como resultado la persona que iba ser allanada muerta, supuestamente al hacerse un disparo en la “sien”, con fines suicida.
Al allanamiento, efectuado a las 5:00 de la mañana del miércoles 21 de agosto, participaron miembros del DINTEL, agentes de Acción Rápida, dos fiscales, en atención a la orden judicial No. 2024-00065 emitida por La Oficina de Servicios Judiciales de Atención Permanente de Barahona, con el objetivo de buscar armas de fuegos y pertrechos militares, pero las autoridades no ha ofrecido detalles del hecho.
En la escena del supuesto suicidio, las autoridades ocuparon una pistola marca Taurus, calibre 9 mm, con su cargador y varias cápsulas, con la cual alegadamente la víctima se hizo el disparo, una escopeta calibre 12, sin numeración y marca, con 6 cartuchos, una canana, una gorra militar con rango de coronel de la FARD, con el apellido Genao.
Además, indican que al revisar el vehículo, tipo minibús, marca NISSAN, color blanco, placa I113172, encontraron en la gaveta del conductor RD $ 63,850.00 pesos en efectivo, en la cartera de la víctima, 2 carnet militar de la ARD, una cédula militar a su nombre, dos cédulas civiles, una licencia de conducir, 2 tarjetas de débito, 3 de crédito y un carnet de la compañía de seguro Ars Humano.