La Federación de Campesino hacia el Progreso, radicada en el municipio Bonao, provincia Monseñor Nouel, claman al gobierno del presidente Luis Abinader para que evite desaparezca el río Yuna.
Recuerda que el Yuna, es un importante afluente de la zona norte del país que irriga miles de tareas de vocación agrícola y ha sido por décadas uno de los principales patrimonios con que cuentan en la comunidad.
Dijeron que desde el año 1992 vienen haciendo propuestas concretas al gobierno para mitigar la pobreza de las familias campesinas residentes a lo largo y ancho del alto Yuna, razón que motoriza el estado de deterioro de la zona y con ello la restauración ecológica de esta importante cuenca.
Sostienen que en el transcurso de estos años esa cuenca solo ha recibido el beneficio de la reforestación con brigadas pagadas por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y algunos programas financiados por instituciones privadas, con los cuales la organización ha logrado restaurar y reforestar importantes áreas, pero no es suficiente para contrarrestar la tala y quema, la agricultura intensiva y la ganadería extensiva.
Advierten que no pueden seguir hablando, porque el gobierno tiene la responsabilidad de no permitir perezca el río Yuna; el agua potable de siete provincias de las más pobladas, produce más del 50% de la energía hidroeléctrica, así como el agua para irrigar más del 60 % de la producción arrocera del país, enclavada en la zona norte.
Señalaron que habrá que remover la mata, incluyendo sus familiares que gradualmente se han ido adueñando, legal o ilegal de porciones de terrenos que jamás debieron dedicarse a las actividades en las que hoy las usan.
Manifiestaron, asimismo, que el gobierno debe garantizar la integridad de los hombres y mujeres que con responsabilidad asume el reto de salvar el río Yuna.