Tomás A. Méndez
Nada obligatorio es bueno. Forzar a los dominicanos a acudir a las urnas es inaceptable. Motivar a hacerlo sí es correcto. La Constitución habla claro de que el voto es UN DERECHO Y UN DEBER CIUDADANO. A quien no lo ejerza no se le puede ni encarcelar, ni desterrar ni castigar.
Si quienes gobiernan tienen REAL interés en que los ciudadanos aumenten su interés en el voto, deben buscar fórmulas para motivarlos. Los programas de gobierno deberían ser claves para motivar al dominicano a dar apoyo a un partido y su candidato.
Pero no es así. ¿Qué ha pasado? Creo que los partidos han “frustrado” al votante. Proponen cosas que al llegar al Gobierno echan a un lado. Y al no cumplir sus promesas, DESMOTIVAN al votante. Lo penoso de todo es que no se observa ningún plan para incentivarlo. De ahí la abstención cada vez mayor.
Ya las mayorías del país no cree en promesas. Es por eso que mis Expresiones quieren sugerir que, desde el Estado, sin importar quien gobierne, se establezcan medidas motivadoras para el votante. Ya los discursos, los programas de gobierno ni las caravanas lo incentivan.
Por ello hago algunas sugerencias que coinciden con la postura del pastor Carlos Peña. Aclaro que soy opuesto al voto obligatorio, pero como demócrata creo que se debe seguir el camino electoral. Creo en acciones motivadoras desde el Estado para que la mayoría de los dominicanos acuda a las urna.
Por ejemplo, a un padre con tres hijos en la escuela, que recibe del Estado mochilas, libros y uniformes, se le motiva a votar condicionando el apoyo del Estado a su voto, por quien desee, pero que vote. Si no lo hace se le retira ese apoyo escolar. Otro ejemplo. Un chofer de autobús que viaja al interior cada día, se le podría motivar liberándolo durante dos o tres años del pago del peaje, si cumple ese sagrado deber.
O un productor agropecuario con préstamo en el Banco Agrícola se le libera del pago de intereses por uno o dos años, si cumple con el deber del voto. Es decir, medidas que no te OBLIGAN ni te sancionan. Pero, si tú no quieres votar, ESTAS EN LIBERTAD, solo que no recibiría uno de esos beneficios que el Estado facilita para ti y tu familia. Hay países que multan al que deja de votar en unas elecciones. Me opongo a la OBLIGATORIEDAD en ese sentido. Pero sí creo en medidas MOTIVADORAS que incentiven al votante a cumplir con ese sagrado deber. !!No al voto obligatorio. Si al voto motivado!!