Participación Ciudadana (PC), presentó este martes su cuarto informe correspondiente a la campaña presidencial y congresual del 2024, en donde valora en general del proceso, resalta aspectos y ocurrencias más relevantes del actual proceso.
Aquí los 7 hallazgos de PC sobre comicios:
Según el documento, República Dominicana avanzó significativamente en la organización de las elecciones 2024, tanto en las municipales como en las presidenciales y congresuales. «La Junta Central Electoral y el Tribunal Superior Electoral han desarrollado un trabajo eficiente, transparente y apegado a las leyes».
Agrega que la campaña electoral para las presidenciales y congresuales mostró un país que ha avanzado en el comportamiento de la población, de los partidos y de los candidatos. «Esperamos que en los próximos días se mantenga el mismo comportamiento cívico».
«La celebración por primera vez de un debate de las principales candidaturas a la presidencia, vicepresidencia y senadurías, mostró una democracia más fuerte, en la que se discuten ideas y propuestas en un ambiente de orden y respeto. Estos debates fueron auspiciados por diferentes organizaciones y medios de comunicación y abarcaron también las candidaturas a diputados de diferentes provincias».
Las actividades masivas y ruidosas, como mítines, marchas, caravanas, discolight, repartición de funditas y bebidas alcohólicas, se redujeron considerablemente. También la propaganda en televisión, periódicos y radio, mientras aumentó el uso de las redes sociales y otros recursos propagandísticos que reducen los costos, los riesgos de violencia física y el ruido.
En esta ocasión se notó una mayor participación de jóvenes y mujeres en las candidaturas, mostrando algunos de ellos un desempeño notable, que augura un interesante relevo para las elecciones del 2028.
Sin embargo, persisten prácticas del pasado que es necesario que desaparezcan en los próximos procesos electorales, las cuales tienen apartados en este informe. Entre esas prácticas se destacan los altos costos y el uso de la publicidad gubernamental en favor de candidatos del partido oficial.
Otro aspecto negativo es el empeño de algunos partidos y candidatos en sembrar desconfianza en el trabajo de las autoridades electorales, sin que esas afirmaciones sean respaldadas por datos objetivos. Listados excesivos de cambios en el personal y el proceso han sido presentados por algunos partidos a pocos días de las elecciones, sin que se visualicen indicadores objetivos de las razones para esos cambios de último momento.