Barahona. – Los cementerios a donde las personas descansan por siempre y sus familiares visitan a sus seres queridos que, y físicamente no están para ponerle flores o limpiar los nichos, también son espacio para la actividad delincuencial, como ocurrió a una bioanalista y su hijo, en el municipio Tamayo, provincia Bahoruco.
La bionalista, quien se trasladó desde Villa Central, Barahona, a visitar la «tumba» de su padre ubicada en el cementerio de Tamayo, fueron asaltados a «punta de pistola» por tres desconocidos.
A Saíma Reyes y su hijo, un estudiante universitario de 23 años, fueron despojados de sus pertenencias: celulares y las carteras de ambos, en las que tonian sus documentos personales: tarjetas bancarias, licencia de conducir, así como la llave del vehiculó en el que se transportaban desde Barahona a Tmayo.
El acto delincuencial se registró a la 6:15 de la tarde de de este sábado, cuando madre e hijo acudieron al «campo santo», que bandalizan malhechores, a llevar flores al padre de la mujer que cumplía un año más de fallecido.
El padre de la profesional del sector salud, quien era nativo de batey 3, dijo que justo cuando salían del cementerio los tres desconocidos los sorprendieron y armados de pistolas los obligaron a entregarles sus pertenencias.
La periodista Emma Pérez, dijo en su blog laopciondigitaldebarahona.blogspot.com, dijo que tras el hecho, se presentaron a la dotación policial de Tamayo, para poner denuncia, por lo que se espera que el Dicrim, adscrito al Departamento de la Dirección Regional Sur de la Policía, con asiento en Neyba, inicie las averiguaciones de lugar a los fines de arrestar a los responsables de este hecho delictivo.
Comunitarios de Tamayo, dijeron que en el cementerio de esta comunidad se esconden delincuentes que se dedican a cometer fechorías, así como a vender drogas y que no hay actuación para detener esta acción que pone en riesgo la seguridad de las personas que van a ese lugar a visitar a sus seres queridos.