Dr. Natanael Gutiérrez
En ciencias es muy común ver la utilización de métodos. Para la investigación se utiliza el método científico. En mercadeo y más que todo en neuromarketing, el paso de vender y promocionar un producto está dentro de los últimos a ejecutar. Sabemos incluso que en ventas existe un efecto boomerang que se da cuando se quiere vender un producto más este no llena las expectativas y la publicidad se vuelve negativa para el producto o el negocio en cuestión. Este principio de marketing es vital, pues es muy común que quienes tienen un producto coloquen el deseo de vender por encima de los fundamentos y peor aún si “aunque le falta algo” aun así la gente lo busque pues “como quiera se vende”.
En lo particular recuerdo que ya a los diez años estuve vendiendo fundas plásticas en el mercado municipal de Barahona, a los doce años inauguramos la primera empresa de la familia (el Copicentro Shadday). A mis catorce ya tenía un taller de laminados, cuando cumplí los diecisiete comenzamos un proyecto de alquiler de ligadoras de cementos. Luego ya estando fuera del país me tocó trabajar construcción en la hermana isla de Puerto Rico, lavar platos en Estados Unidos y luego con la experiencia y los recursos acumulados dar paso a la construcción de nuestra empresa Natclinic.
De lo aprendido en todo este trayecto, para mí lo más importante, “la calidad en los servicios es la clave para la sostenibilidad de un proyecto a largo plazo”. ¿Por qué me interesó tratar este tema? porque nuestra región en sentido general no ha entendido esto, por lo cual, es muy común escuchar las quejas sobre la mala calidad de las habitaciones de hospedajes, de lo pésimo del servicio en restaurantes, de los altos costos de la comida en los balnearios, de la falta de baños públicos en los establecimientos comerciales, de la falta de calidad de las infraestructuras de alquiler, y lo que es peor aún, falta de amabilidad de quienes prestan servicios.
Todo esto nos lleva a una pregunta, ¿estamos en la región listos para ser promocionados como la perla del Sur? Siendo sincero yo entiendo que no, y esto, aunque está muy ligado al buen desempeño que deben tener las autoridades para reglamentar todos esos lugares de servicios y exigirles que por favor sean consciente, justos y humanos. Sí, porque yo creo que eso no se le debió pedir nunca a los micro y macro empresarios de la zona, pues no me parecía a mí que ellos no saben que aportando con la calidad de sus servicios podemos estar todos construyendo una mejor región, que no es solo responsabilidad de los políticos, ni de los gobiernos, sino que es un deber de todos aportar a que mañana podamos decir, es cierto yo estoy haciendo mi aporte por Perla del Sur.
La principal limitante para Barahona y toda la región Enriquillo, me parece es la falta integración a una visión de progreso, es la resistencia que hace cada sector para entender lo valioso que puede ser su aporte, es decirle a la gerencia de las universidades que se reúnan y hagan lo imposible por traer las carreras que se necesitan para avanzar, es decirle a los comerciantes que modernicen sus ofertas de negocios, es decirle a al sector educación inicial que necesitamos colegios bilingües, es que alguien haga una oferta de entretenimiento para niños y jóvenes que esté alejada de los centros de bebidas alcohólicas, es decirle a la gente que pague por lo que tiene valor. Pues muchos emprendedores creen que podrán vender más si venden más barato y eso solo los lleva a quiebra.
Yo en lo particular vivo en carne propia la pena de que los profesionales de mi área (odontología), no quieren vivir en la provincia, aunque ganen más dinero, muchos me expresan su inconformidad por la carencia de lugares apropiados para la sana diversión, es la falta de un cine, una plaza, un buen bar, una biblioteca y demás lo que no nos hace atractivos. ¿Queremos desarrollar? unámonos, coloquemos los intereses regionales por encima de los intereses particulares, esto parecería ser muy romántico, más a la vez es solo intentar entender que si lo logramos a todos nos irá mejor, es la teoría del bien común “si tú estás bien yo estaré bien”.
A esto se nos presenta el reto de que las redes sociales han hecho de Barahona y Pedernales verdaderos atractivos turísticos, pero desde que salimos de Santo Domingo no contamos con paradores apropiados para un público de altas exigencias, estas son grandes oportunidades de negocios que no están siento aprovechadas. Debemos construir una experiencia al momento de venir al sur, esa debe ser la meta.
Qué decir del hecho de que aún en la principal ruta de autobuses la gente come dentro de ellos, algo que, aunque se vería como normal deja claro en el atraso que aún vivimos. Debemos colectivamente superar la visión prehistórica de los servicios, debemos amar nuestra región por eso todos, sí, todos debemos aportar a ella, sino lo hacemos así nos quedaremos esperando que venga quizás Super Man o la Mujer Maravilla a resolver lo que es una responsabilidad de todos nosotros, y claro sería genial que mostremos músculos en las instituciones que nos agrupan para poder exigir a los gobiernos locales y gobierno central su parte en el proceso de desarrollo de nuestra región.
Unamos voluntades para construir una Barahona más grande más fuerte y más productiva, que sea ejemplo para la región y el país.
Autor es odontólogo, propietario de Natclinic
Bendiciones, Enero 2023