Con un llamamiento a fortalecer las entidades internacionales y regionales, así como a enfrentar los desafíos que no respetan fronteras políticas, el presidente dominicano, Luis Abinader, inauguró anoche en Santiago la 56 Reunión Ordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de la Integración de Centroamérica (SICA).
Abinader, afirmó que los problemas que amenazan a los países de la región deben afrontarse a través de la colaboración entre las naciones, por solicitó fortalecer los mecanismos internacionales, regionales, los cuales deben entenderse como un eje para la política exterior de cualquier nación que busca el desarrollo y la paz.
”Esos mecanismos deben responder a las realidades del día a día y devolver en beneficios mucho más que la inversión realizada en ellos”, observó.
Manifestó que República Dominicana asumió la Presidencia Pro-Témpore con el firme convencimiento “de que no todas las soluciones a los problemas que nuestros ciudadanos enfrentan se encuentran solo a nivel nacional”.
Además, del presidente anfitrión, la apertura de la 56 Cumbre del SICA, celebrada en el Gran Teatro del Cibao, reunió al presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves Robles, el primer ministro de Belice, Juan Antonio Briceño; y el vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa Garay, en representación del presidente Nayib Bukele.
También, Geovani René Castillo Polanco, viceministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, Renato Florentino Pineda, tercer designado presidencial de Honduras, Janaina Tewaney, ministra de Exteriores, de Panamá, Denis Moncada, ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, y Werner Vargas, secretario general del SICA.
“Paz, libertad, democracia y desarrollo, eso es lo que estamos esperando en el día de hoy como países miembros del SICA, abogar por un diálogo político que nos permita fortalecer nuestros lazos y estrechar aún más el trabajo que hemos venido desarrollando”, afirmó Werner Vargas, en su discurso de introducción.
Dijo que la presidencia Pro Tempore del SICA encabezada por el presidente Luis Abinader, el canciller y su equipo de trabajo, han impreso un importante valor y dinamismo al trabajo del organismo y le han permitido encontrar los espacios necesarios para lograr el diálogo político imprescindible para el desarrollo de los pueblos.