La estrella del baloncesto estadounidense Brittney Griner fue sentenciada este jueves en un tribunal ruso a 9 años de prisión por cargos de «drogas», en un caso que ha elevado las tensiones por la llamada «diplomacia de rehenes» entre Washington y Moscú.
Griner, de 31 años, fue arrestada en un aeropuerto de la capital rusa en febrero pasado luego de que los agentes de aduanas encontraran en su equipaje cartuchos de vapeador que contenían aceite de cannabis, que es ilegal en Rusia y que la deportista asegura utilizaba con fines medicinales.
Desde entonces ha estado en la cárcel y, para reducir su sentencia, la medallista olímpica se declaró culpable de cargos relacionados con las drogas, aunque dijo que no tenía la intención de infringir ninguna ley.
EE.UU. afirma que está «detenida injustamente» y pidió al Kremlin liberarla en un intercambio de prisioneros, aunque se desconoce si ha obtenido respuesta sobre la propuesta.
Tras conocer la sentencia este jueves, el presidente Joe Biden la calificó de «inaceptable» y pidió a las autoridades rusas su liberación inmediata.
«Hoy, la ciudadana estadounidense Brittney Griner recibió una sentencia de prisión que es un recordatorio más de lo que el mundo ya sabía: Rusia está deteniendo a Brittney erróneamente», dijo en un comunicado.
La condena
Además de la sentencia a 9 años de cárcel, la corte le ordenó pagar una multa de un millón de rublos (US$16.300) y le informó que debe cumplir su prisión en una colonia penal.
Los abogados de Griner calificaron el veredicto como «absolutamente irrazonable» y aseguraron que presentarán una apelación.
La defensa criticó además que el tribunal «ignorara por completo todas las pruebas de la defensa y, lo que es más importante, la declaración de culpabilidad [de Griner]», una de las esperanzas de la deportista para recibir una menor condena.
No obstante, el tribunal aseguró que la condena es coherente con las leyes rusas y que tuvieron en cuenta para la sentencia el hecho de que la estadounidense «ya había pasado un tiempo considerable» detenida.
Poco antes de anunciarse la sentencia, Griner pidió clemencia al tribunal.»Nunca quise lastimar a nadie. Nunca quise poner en peligro a la población rusa. Nunca quise violar ninguna ley aquí», se disculpó
Días antes de declararse culpable el mes pasado, Griner escribió una carta a Biden en la que le pedía intervenir en su caso. «Me siento aquí en una prisión rusa, sola con mis pensamientos y sin la protección de mi esposa, mi familia, mis amigos, mi camiseta olímpica o cualquier otro logro. Me aterra quedarme aquí para siempre», dijo en su misiva.