Los extranjeros: Juan Mesa Paternina, de nacionalidad colombiana y Antonio Jesús Paz, venezolana, fueron condenados por el Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia de Azua, a diez años de prisión, los cuales eran imputados por narcotráfico.
Mesa Paternina y Paz, según el acta de acusación que presentó el Ministerio Público, el día 10 de diciembre de 2018, con el apoyo del fiscal titular de la Azua, se le ocuparon 198 kilo de cocaína y que sirvieron como prueba principal para dictarle la condena impuesta.
En la audiencia fueron presentadas evidencias materiales, científicas, documentales y testimoniales que se recuperaron en el allanamiento tras el operativo que comenzó el exfiscal titular de Barahona, Yván Ariel Gómez Rubio, miembros de antinarcóticos de la Policía Nacional, así como el titular del Ministerio Público de Azua de Compostela.
El exfiscal Gómez Rubio, quien fue el testigo principal en la exposición ante el citado tribunal azuano, explicó cómo se desarrolló el operativo que terminó con la incautación de al menos 198 kilos de cocaína, versión esta que determinó junto al testigo Wandy Ramírez, procurador fiscal de Azua la licitud de las actuaciones y la legalidad de los medios aportados.
El tribunal presidido por las juezas Adelaida Luciano, Loida amador e Idaiza Medina, además, de la condena impuesta, la que solicitó el Ministerio Público, dispuso el decomiso de los bienes incautados: una finca, fusiles, pistolas, entre otros.
Durante la audiencia los imputados confesaron y asumieron los hechos tal y como fueron planteados en la acusación, lo que confirmó aún más la coherencia y veracidad del testimonio de los fiscales que expusieron como testigos.
El tiempo encaja todo en su lugar
Se recuerda que el exfiscal titular de Barahona, Gómez Rubio, se le investigó, incluso destituyó del cargo, por participar en el operativo que con la condena a los detenidos hace cuatro años, deja dudas de sí las acusaciones que se le formuló por la gestión que encabezó el exprocurador Jean Alain Rodríguez, hoy procesado por corrupción y principal sospecho de la del caso Medusa, así como el entonces inspector Bolívar Sánchez, se correspondían con la verdad de los hechos, respecto a la pérdida de drogas que se le imputaba al exmagistrado.
Contactado por #LaLupadelsur, el exfiscal titular, Gómez Rubio, dijo que deja todo al tiempo “que hace cada cosa encaje en su lugar”, tras señalar que se siente tranquilo y conforme, ya que se demuestra que su actuación, por la que se le procesó y destituyó ha dado resultados positivos.
Acusó la gestión del exprocurador Jean Alain Rodríguez, conforme a como se le está acusando, de haber liderado una estructura que se dedicó al chantaje, extorsión y a manipular la verdad a través de miles de cuentas falsas en las redes sociales.
“Además, era consciente que al no ser parte del equipo de la gestión pasada iban a aprovechar cualquier situación para crear las vacantes y así montar su estructura dentro del Ministerio Público, que aún permanece”, expuso Gómez Rubio.
Asimismo, manifestó que se comprometió a comparecer a cada cita que le haga el tribunal de Azua, “porque aun fuera del Ministerio Público, defiendo las actuaciones legales que se hicieron y que terminaron con la condena de los apresados y su confesión”.
Dijo que lo peor mal que como fiscal hizo a la gestión de Jean Alain Rodríguez, fue no apoyar sus candidatos al Consejo Superior del Ministerio Público y criticar los nombramientos que se hacían por recomendación de los enlaces comunitarios en todas las provincias incluyendo Barahona.
“Porque era con la intención de establecer una estructura política que con el tiempo no se le dio por obvias razones, pero Dios y el tiempo le han dado a cada quien lo que se merece”, expuso el magistrado titular del Ministerio Público en Barahona.
Gómez Rubio, dijo que a pesar del daño que se le hizo, tanto moral como profesional, sindicándolo en un caso, así como hechos a los que actuó apegado a las normas y protocolos establecidos en el Ministerio Público, no siente “odio ni rencor”, sino lástimas por la situación en la que se encuentra el exprocurador, mientras él “duerme todas las noches con su familia”.