La violencia y la delincuencia se «estacionan» en la provincia Santiago y otros pueblos del Cibao, una situación que preocupa a diferentes sectores, mientras la Policía dice toma acciones para «garantizar» la seguridad ciudadana.
Según estadísticas de las propias autoridades, en 30 días han caído 32 personas asesinadas vinculados a la violencia en Santiago y otras provincias del Norte, en su mayoría vinculadas a conflictos personales, riñas, pasionales, en enfrentamiento a tiros con la Policía y otros hechos.
El lunes el capitán de la Policía, adscrito a la Dirección de Investigaciones Criminales (Dicrin), de la Dirección Cibao Sur, con sede en Bonao y un mensajero murieron en medio de un incidente ocurrido en Piedra Blanca, Monseñor Nouel.
Las víctimas son el oficial Juan Abréu Rosario y el civil Vanderluis de la Cruz Santiago, ocurrido en el trayecto Piedra Blanca-Juan Adrián, que según el informe dos individuos vestidos de policías montaron un retén en Piedra Blanca y que tenían retenido un pequeño autobús.
Hace tres días un niño de 12 años mató de una pedrada a Fabio Angel Rodríguez, que sufría discapacidad mental en el sector Cienfuegos, al oeste de Santiago.
Familiares y vecinos narraron que el menor molestaba al fenecido para verlo enojado. El domingo lo ultimó en un incidente que se originó en un colmado, de acuerdo a sus parientes.
El pasado domingo Lizandro Hiraldo ultimó de un disparo a Carlos Andrés Cabrera Cabrera (Bobito) en el barrio Baracoa, en la parte baja de Santiago.
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