Santo Domingo.- Con un compromiso social de trabajar por un país cada vez mejor, pastores y líderes de distintas denominaciones evangélicas concluyeron el Día Nacional de Ayuno y Oración, convocado por el ministerio Nagua Ciudad de Dios que preside Miguel Vásquez Martínez.
Durante el acto celebrado en el salón Hermanas Mirabal del Palacio Nacional, los pastores Dío Astacio, enlace entre los evangélicos y el Poder Ejecutivo, y Miguel Vásquez coincidieron en señalar que los líderes religiosos tienen el compromiso de actuar para aportar su granito de arena con el objetivo de reducir al más bajo nivel la violencia en el país.
Vásquez llamó a los dominicanos a la humillación y oró por el perdón de los pecados de toda la nación.
En tanto que el director de la Oficina Enlace con las iglesias recordó que problemas como el maltrato al medio ambiente, la inseguridad, los robos y atracos no son exclusivos de la responsabilidad de las autoridades, también las congregaciones tienen el sagrado deber de velar por superar ese tipo de situaciones que viene afectando al país en los últimos años.
Enfatizó que las iglesias son una excelente herramienta para con su feligresía recorrer casa por casa todo el país, predicando las buenas nuevas del Señor, por lo cual anunció una campaña “Predicando la paz”, con la cual esperan impactar a los 158 municipios de la República Dominicana.
Otro compromiso asumido por los representantes de las iglesias fue fomentar los hábitos que ayuden al ecosistema, por ejemplo, reduciendo el consumo de plásticos y otras prácticas para tener un mundo mejor.
La iniciativa del evento es del pastor Miguel Vásquez, quien la comenzó en Nagua hace 18 años con el Ministerio Nagua Ciudad de Dios que ha venido realizando año tras año un día de reencuentro con el Señor en ese municipio de la provincia María Trinidad Sánchez, donde se paralizan las actividades educativas, comerciales y empresariales para integrarse a esa jornada de fe y oración.
Desde febrero pasado, la jornada de oración se ha extendido a los 158 municipios, además del Palacio Nacional, “para proclamar que República Dominicana es Nación de Dios, como lo soñaron los fundadores de la patria”, afirmó Vásquez.
Pastores de distintas denominaciones clamaron también a Dios por las 32 provincias y sus respectivos municipios, la protección a las familias, el Congreso Nacional, la justicia, la salud, la economía, el medio ambiente y el bienestar de todos.
Además, entre los presentes estuvieron el senador Milcíades Franjul y el pastor Manuel Díaz, quienes elevaron plegarias al Altísimo para que derramen bendiciones sobre la República Dominicana.
Este segundo encuentro de este año denominado “República Dominicana Nación de Dios” contó con la presencia del ministro de Interior y Policía, Jesús Vásquez Martínez, junto a su esposa Divina Marte.