Santo Domingo.- El Partido Revolucionario Dominicano (PRD), inmerso en una crisis interna una vez salió del poder, tras su alianza con el de la Liberación Dominicana (PLD), ya que antiguos aliados del presidente de la organización, quieren la «cabeza» de Miguel Vargas, pero un giro en la confrontación esa entidad política llama, en cambio, a la unidad de «todos» ante la actual crisis, teniendo como prioridad la protección de la salud de la gente, haciendo especial énfasis en controlar y superar la COVID-19.
El llamado implica la necesidad de que en esta lucha para enfrentar la crisis sanitaria, económica y social que hoy golpea al pueblo dominicano, todos los dirigentes de esa organización, trabajen por un PRD que abrace esa causa del pueblo tanto en lo nacional como en lo local, en aras de que el PRD vuelva a ser la voz del pueblo, como enseñara su líder José Francisco Peña Gómez.
Para lograrlo, el PRD cree fundamental participar junto a las organizaciones sociales, religiosas, comunitarias, profesionales, de jóvenes, de mujeres, en su lucha por mejorar sus condiciones de vida.
“La sociedad dominicana lo que demanda de nosotros como políticos es unidad y armonía. Reclama de políticos que conozcan sus problemas y cómo solucionarlos. Eso es lo que tenemos que hacer los perredeistas en estos tiempos de crisis sanitaria, económica y social en que vive el mundo y en especial nuestro pueblo”. aseguran en nota enviada.
Apertura y crecimiento
Exhortó, también, a sus dirigentes a seguir trabajando con fe, entusiasmo y dedicación por su renovación, apertura y crecimiento, con la participación de todos aquellos quienes estén dispuestos, sin exclusión ni descalificaciones «de ningún compañero».
Apuesta a un trabajo que esté siempre dentro del marco del respeto, la disciplina y apego a los procesos democráticos establecido en sus estatutos.
“Todos somos importantes y necesarios, viejos y jóvenes. Combinar la juventud y la experiencia es la clave. Los asuntos internos del partido respetando el derecho a la crítica y opinión de los demás, debemos discutirlo a lo interno de sus organismos. El debate estéril de los asuntos partidarios en público, en nada contribuye a la imagen del partido pues es un asunto que solo compete a los perredeistas. Solo contribuye a dañar la imagen del partido y de los dirigentes que lo protagonizan”. Agrega.
Recordó que esa organización tiene sus organismos, mecanismos y procedimientos para canalizar las opiniones y diferencias, por lo que conveniente «dejar atrás esa práctica negativa y no prestarse a ese juego».
En cambio, la entida política, plantea que lo más importante es centrarse en los trabajos partidarios que trazan sus autoridades partidarias y abrazar las causas y demandas de la sociedad a través de sus organizaciones sociales, calificándolo como «el gran desafío».