El Centro Nacional de Huracanes de Miami (NHC), informó este viernes que se formaó la depresión tropical #31 en el área del Caribe, que podría convertirse en un huracán cuando se aproxime a Nicaragua y Honduras a partir del próximo domingo.
Previamente el organismo advirtió a los citados dos países que estuvieran atentos al desarrollo de los aguaceros y tronadas asociados a un amplio sistema de baja presión sobre el Caribe.
Ambas naciones centroamericanas acaban de sufrir el devastador impacto de Eta, un ciclón que llegó a ser huracán mayor y se encuentra ahora sobre el Atlántico convertido en un sistema post-tropical.
La nueva depresión tropical #31 está a unas 310 millas (unos 500 km) al sursureste de Kingston (Jamaica) y presenta vientos máximos sostenidos de 35 millas por hora (55 km/h), moviéndose en dirección oeste suroeste a 7 millas por hora (11 km/h).
En la trayectoria pronosticada, el sistema atravesará el centro del Mar Caribe durante el próximo día o dos y se aproximará a las costas de Nicaragua y el noreste de Honduras el domingo por la tarde y el lunes.
El NHC pronostica que la depresión se fortalezca a una tormenta tropical, que se llamaría Iota, hoy mismo y siga creciendo en intensidad durante el fin de semana hasta llegar a ser un huracán mayor.
El NHC no ha emitido por ahora alertas, pero advierte de que esta noche puede lanzar una vigilancia de huracán para zonas de Nicaragua y Honduras.
Hasta el próximo miércoles se espera que produzca lluvia en el norte de Colombia, Panamá y Costa Rica, Jamaica y el sur de Haití.
En Centroamérica, el sistema tiene el potencial de producir de 20 a 30 pulgadas (508 a 762 mm) de lluvia, especialmente en el norte de Nicaragua y Honduras, donde podrían producirse inundaciones repentinas significativas y desbordes de ríos y deslizamientos de tierra.