La Paz.- LA misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), la Iglesia Católica y movimientos cívicos en los nueve departamentos demandan la segunda vuelta en los comicios entre las dos fuerzas políticas más votadas, el MAS y CC con el objetivo de “pacificar Bolivia”.
En el caso de los representantes de la OEA que llegaron para vigilar las elecciones generales del pasado domingo, se recomendó que una vez concluido el cómputo oficial del Tribunal Supremo Electoral (TSE), en caso de que el margen de diferencia entre los candidatos más votados sea superior al 10 por ciento con cifras ínfimas, se realice una segunda vuelta.
“En el caso de que, concluido el cómputo, el margen de diferencia sea superior al 10 por ciento, estadísticamente es razonable concluir que será por un porcentaje ínfimo. Debido al contexto y las problemáticas evidenciadas, continuaría siendo una mejor opción convocar a una segunda vuelta”, se lee en el informe que fue leído durante la conferencia de prensa en La Paz.
Asimismo, calificaron como “alarmante” la renuncia del vicepresidente del TSE, Antonio Costas, y lamentaron la desconfianza generada en la población.
La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) propuso ayer que una de las formas de pacificar el país es “convocar a una segunda vuelta electoral, pero con nuevos vocales en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), después que las actuales autoridades fueran acusadas por su afinidad con el gobernante MAS”.