Puerto Príncipe.- «No entregaré el país a pandillas armadas y narcotraficantes».
Así de firme estuvo el presidente Juvenel Moise en una alocución al país anoche a través de la telvisora nacional, luego de mantenerse en silencio tras 8 días de violencia por una protesta auspiciada por la oposición política y sectores adversos a su gobierno que le piden renunciar.
«Yo, Jovenel Moses, Jefe de Estado, no entregaré al país en manos de bandas armadas y narcotraficantes», dijo a los que piden su renuncia.
«Es inaceptable que las personas que tienen una función oficial se manifiesten en las calles junto a los líderes de pandillas que buscan los tribunales. Es una señal que no respeta a la democracia ni a las instituciones», dijo el jefe de Estado en su discurso anoche.
Recordó que en la manifestación del miércoles 13 de febrero, tres senadores, entre ellos Yuri Latortue y varios diputados, tomaron la iniciativa, paralelo al bicentenario del país.
Según el presidente, la gente aprovechó la agitación en el país para enviar un avión con drogas a Mole Saint-Nicolas, los prisioneros liberados en el sur «utilizaron a fugitivos internacionales para tratar de asesinar al presidente …»
Recordó que tras los movimientos del 6 y 7 de julio, había apelado a un ex candidato presidencial que estaba frente, Jean-Henry Céant, para detenerlas.
Afirmó hay personas en contra de la democracia y el estado de derecho y aprovechó una vez más el presidente Moïse para llamar a sus detractores al diálogo para sacar al país de la crisis.
Según él, los sucesivos gobiernos de transición en el país no han ayudado a cambiar las condiciones de vida de la población, sino que, más bien, han provocado es inestabilidad y el narcotráfico.